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Arrecian las presiones sobre el fiscal jefe Anticorrupción por su participación en una sociedad 'offshore'

A las críticas al fiscal jefe Anticorrupción, Manuel Moix, y las peticiones de la mayoría de los partidos de la oposición para que dimita después de hacerse público que tiene el 25% de una sociedad radicada en Panamá, se han sumado ahora sus propios compañeros, la Unión Progresista de Fiscales (UPF)

Arrecian las presiones sobre el fiscal jefe Anticorrupción por su participación en una sociedad ‘offshore’

A las críticas contra el fiscal jefe Anticorrupción, Manuel Moix, y las peticiones de la mayoría de los partidos de la oposición para que dimita tras hacerse público que tiene el 25% de una sociedad radicada en Panamá, se han sumado ahora sus propios compañeros, la Unión Progresista de Fiscales (UPF), que a través de un comunicado hecho público, expresan su preocupación por la situación  creada y creen que lo que debe hacer es dimitir.

«La Unión Progresista de Fiscales muestra su enorme preocupación por la imagen de la Fiscalía Anticorrupción y de la Carrera en general si, como parece, no va a tener ninguna consecuencia la noticia confirmada de que el Jefe de la Fiscalía Anticorrupción tiene participaciones en una empresa radicada en un paraíso fiscal y, por lo tanto, opaca para el control de la administración española», se indica en el comunicado.

El presidente de la UPF, Álvaro García Ortiz, ha asegurado este miércoles que aunque el fiscal Moix tuvo muchos años para regular la sociedad offshore de Panamá, no lo hizo. «Moix tendría que haber evitado esta situación informando a sus superiores antes de acceder al cargo», ha declarado a Onda Cero.

La UPF, que ya había cuestionado el nombramiento de Moix antes de que estallara el escándalo, considera que los miembros de la Fiscalía Anticorrupción deben ser «transparentes en todo» y que la noticia sobre la cuenta en Panamá demuestra «que su comportamiento no es ejemplar», ha indicado García Ortiz.

 

Ya el 8 de mayo, la UPF emitió otro comunicado alertando sobre el deterioro de la imagen de la Fiscalía General del Estado y el clima «de sospecha generalizada sobre la independencia y autonomía de los fiscales» que exigían una acción inmediata, contundente y firme del fiscal general «para recuperar la credibilidad perdida por la institución».  La nota se hizo pública después de conocerse que Moix había intentado apartar a los fiscales encargados de la investigación sobre el ‘caso Lezo‘, que llevó a prisión al presidente del Gobierno de Madrid, el popular Ignacio González, acusado de corrupción.

Mientras el Partido Popular y el Gobierno, empezando por el presidente Mariano Rajoy, defienden a Moix, los principales partidos de la oposición exigen explicaciones urgentes. En este sentido, el Grupo Socialista ha presentado una iniciativa para que comparezcan en comisión el ministro de Justicia, Rafael Catalá, que fue reprobada por la Congreso el 18 de mayo por la oposición, y  el Fiscal General del Estado, José Manuel Maza. Los socialistas quieren saber con su iniciativa los motivos por los que Maza «aún no ha cesado a Moix».

El cuestionado fiscal mantiene que no ha cometido ninguna irregularidad, que no informó a sus superiores «sobre mi sociedad regularizada porque lo consideré irrelevante; no había incompatibilidad», ha añadido en una entrevista concedida a Onda Cero, pero dada la repercusión mediática del caso, admite que «no medí las consecuencias«.

Herencia de los padres

Manuel Moix posee desde 2012 el 25% de una sociedad offshore en Panamá junto con sus tres hermanos, denominada Duchesse Financial Overseas, heredada de sus padres. La empresa, de la que el fiscal asegura no haber tenido conocimiento hasta el fallecimiento de sus progenitores, en 2008 y 2011, es propietaria a su vez de un chalé en la localidad madrileña de Collado Villalba, valorado en unos 550.000 euros, según la exclusiva publicada el martes el diario digital Infolibre. Moix, que ha admitido la existencia de dicha sociedad en el paraíso fiscal de Panamá, también mantiene que «está debidamente declarada a Hacienda» y que si no ha podido ser disuelta hasta el momento es porque resulta muy caro hacerlo. «La gente piensa que cerrar algo así es barato», ha puntualizado este miércoles en la radio.

Moix ha anunciado que tiene prevista una conversación en las próximas horas con el Fiscal General del Estado y que si le pide que dimita lo hará porque «no tengo ningún apego al cargo».

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