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El equipo de Donald Trump vive su propio House of Cards

El equipo de Donald Trump vive su propio House of Cards

Reuters

Ryan Lizza, corresponsal de The New Yorker en Washington, relata lo que parece un capítulo de la famosa serie de Netlix, House of Cards, donde la lucha por el poder estadounidense llega incluso a amenazas hacia los periodistas y compañeros de equipo que se atrevan a “filtrar información”.

Lizza relata que el miércoles por la noche recibió una llamada telefónica de Anthony Scaramucci, el nuevo director de comunicaciones de la Casa Blanca.

Añade que el hombre no se mostraba contento y que se podía deber a que él (Lizza), previamente, había escrito un tuit en el que decía que un “alto funcionario de la Casa Blanca” estaba cenando junto al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, la primera dama, el locutor de Fox News, Sean Hannity, y a Bill Shine, ex copresidente de la cadena televisiva acusado de acoso sexual.

Al parecer Scaramucci estaba molesto porque alguien le filtró al periodista la información de la cena. En la conversación incluso lo amenazó con “eliminar a todo el equipo de comunicaciones” si no le confesaba quién le había dado la información.

“En opinión de Scaramucci, el hecho de que la noticia de la cena hubiera llegado a un reportero era una prueba de que sus rivales en el Ala Oeste, en particular Reince Priebus, jefe del gabinete de la Casa Blanca, conspiraban contra él”, escribió en su artículo Lizza.

«Todos serán despedidos por mí», fueron, según el comunicador social, parte de las amenazas de Scaramucci ante su negativa de revelar la fuente. También aquel insistió en que Priebus estaba preocupado y molesto porque supuestamente no había sido invitado a la cena. «Reince es un maldito esquizofrénico paranoico, un paranoico», añadió, según Lizza.

El comunicador reseña que se negó a revelar su fuente pero afirma que Sacaramucci buscó mil formas de lograr que este dijera que quien había dado el dato de la cena era el jefe de gabinete: Reince Priebus.

Asimismo, que Scaramucci estaba particularmente enojado por un trabajo hecho por el medio Politico en el que se divulgaron detalles de sus finanzas.

El periodista de The New Yorker añade que poco después de conversar con él, el nuevo jefe de Comunicaciones de la Casa Blanca soltó el controvertido tuit en el que parecía acusar al jefe de gabinete, Reince Priebus.

«A la luz de la filtración de mi información financiera, que es un crimen, voy a contactar al @FBI y al Departamento de Justicia», escribió Scaramucci, agregando en el mensaje la cuenta en Twitter de Priebus, @Reince45, y la etiqueta #pantano.

Poco después borró el tuit y negó estar pidiendo una acusación formal contra su colega, aunque el relato de Lizza deja muchas dudas al respecto.

Los detalles de las finanzas son una información que todos los altos funcionarios de la Casa Blanca deben entregar a la oficina gubernamental de ética y que es accesible para cualquiera que las solicite.

Scaramucci fue designado director de comunicaciones de la Casa Blanca la semana pasada, y rápidamente se ha convertido en el rostro público del Gobierno y un poderoso defensor del presidente Trump.

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