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Muere el estadounidense que estuvo preso en Corea del Norte

El estudiante estadounidense Otto Warmbier, que ha estado preso en Corea del Norte durante más de un año y ha sido entregado la semana pasada en coma a su familia, ha fallecido este lunes en su Ohio natal, ha informado su familia.

Muere el estadounidense que estuvo preso en Corea del Norte

El estudiante estadounidense Otto Warmbier, que ha estado preso en Corea del Norte durante más de un año y ha sido entregado la semana pasada en coma a su familia, ha fallecido este lunes en su Ohio natal, ha informado su familia.

«Con tristeza debemos informarles de que nuestro hijo, Otto Warmbier, ha completado su viaje a casa», ha explicado la familia en un comunicado, en el que detalla que el joven, de 22 años, ha fallecido rodeado de sus seres queridos.

«Sería fácil, en un momento como este, centrarse en lo que hemos perdido, el futuro que no pasaremos con este joven cariñoso, entretenido y brillante, cuyo entusiasmo no conocía fronteras. Pero elegimos enfocarnos en el tiempo que nos ha dado esta persona extraordinaria», ha señalado la familia del estudiante.

En el comunicado, los padres, Fred y Cindy Warmbier, agradecen a los doctores del hospital de Cincinnati al que ha llegado Warmbier el 13 de junio por hacer todo lo posible por salvarle, tras haber sido entregado por las autoridades norcoreanas en coma y con serios daños cerebrales.

La familia ha condenado «el horrible y tortuoso abuso» que ha recibido de manos del Gobierno norcoreano, al que han responsabilizado.

Los padres aseguran que, pese a que el joven ha llegado a su Ohio natal incapaz de hablar o responder a estímulos, «el semblante de su cara cambió» al día siguiente de su llegada.

«Estaba en paz. Estaba en casa y creemos que lo pudo sentir», ha indicado la familia.

El secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, ha anunciado la semana pasada que su departamento había logrado la liberación del joven, que ha sido entregado a su familia en un vuelo privado en coma y con graves lesiones cerebrales.

Warmbier llevaba más de un año en coma, en el que ha entrado poco después de su última aparición en público, durante su juicio en Pyongyang en marzo de 2016 por supuestamente robar un cartel de propaganda, según su familia.

El régimen de Corea del Norte sostiene que Warmbier ha sufrido un brote de botulismo y le han dado una pastilla para dormir, pero no ha vuelto a despertarse, algo que la familia ha refutado.

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