Por otro lado, el director general de fED explica que el vino tiene sus tiempos, la gran mayoría se cría en botella y, por tanto, no afecta si hay escasez de envases o suministros. «El vino se embotella y pasa un tiempo así, mínimo 15 días el más básico; pero si hablamos de un crianza o reserva, meses o incluso años», por lo que atendiendo a esto, el vino de esta Navidad ya estaría embotellado.