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Una encuesta pronostica un empate entre PSOE y PP con Vox y Podemos como beneficiados

Las formaciones de Díaz y Abascal lograrían beber del reguero de votos que deja el bipartidismo

Una encuesta pronostica un empate entre PSOE y PP con Vox y Podemos como beneficiados

Santiago Abascal e Iván Espinosa de los Monteros conversan en el Congreso. | Alejandro Martínez Vélez (Europa Press)

Malos tiempos para el bipartidismo. La pérdida progresiva de apoyos podrían llevar al Partido Popular y al Partido Socialista a una situación inédita en la democracia española. Si se celebraran hoy elecciones, ambas formaciones empatarían en el número de diputados, con 102 cada uno. Los socialistas se impondrían en el número de votos, pero por la mínima, ya que se harían con un 25,2% de los apoyos frente al 25% de los populares.

Estos son algunos de los primeros datos que señala la encuesta de IMOP-Insights para El Confidencial en el mes de diciembre, que apunta a que tanto PP como PSOE habrían perdido desde noviembre más de 900.000 votos y 16 escaños en conjunto. Este empate entre las formaciones del bipartidismo tendría dos claros beneficiarios. Vox y Unidas Podemos, que continúan creciendo a costa de las pérdidas de las dos formaciones tradicionales.

En la derecha, Vox recorta distancias con el PP

El gran triunfador de esta encuesta es Vox, que se agarra al tercer puesto obtenido en las elecciones generales de noviembre de 2019, y continúa mejorando. El sondeo da a la formación de Santiago Abascal 15 diputados más que en los anteriores comicios y les aupa hasta los 67 escaños y el 18,6% de apoyo electoral.

La crisis en el Partido Popular tras la guerra abierta entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso por el control de Madrid deja un reguero de votos que desde Vox han sabido recolectar para recortar posiciones con Génova 13. Si el PP había alcanzado en las encuestas de octubre su máxima distancia, en el mes de diciembre se encuentra en su punto más bajo al obtener el 54% de los votos en la derecha, mientras que los de Abascal se llevan el 40%.

Con las elecciones de Castilla y León a la vuelta de la esquina y los buenos resultados que las encuestas auguran al popular Alfonso Fernández Mañueco, el PP espera remontar, como ya hiciera tras los comicios en Madrid o la moción de censura fallida en Murcia, y recuperar el claro liderato en la derecha que hace meses que se les diluye. De no lograrlo, la alternativa de un Gobierno liderado por Pablo Casado parece lejana.

La llave de la Moncloa se logrará a través de pactos, según señalan las encuestas. Aunque la derecha logra una clara ventaja en cuanto a intención de voto en comparación con la izquierda (46,4% contra 39,2%), el número de escaños que obtendría la suma de PP, Vox, Ciudadanos y Navarra Suma no llega a los 176 diputados necesarios, sino que se queda a tan solo 4, en 172.

La alternativa de Ciudadanos, condenado a luchar por no desaparecer y por lograr al menos un solo diputado, queda desaparecida. Los partidos de la España vacía que han anunciado su aparición pueden llegar a ser un lastre de votos para los populares, como te contamos en exclusiva en THE OBJECTIVE. Sin embargo, en caso de ser necesarios, podrían ser una alternativa para formar un Ejecutivo.

Una izquierda diluida en la que Díaz crece a costa del resto

Si el PSOE registra bajadas con respecto a las elecciones de noviembre de 2019 y a los anteriores sondeos, quien (a pesar de no alcanzar los mejores resultados del partido, cuando este estaba liderado por Pablo Iglesias) sí que mejora mes a mes es Yolanda Díaz. La líder de Unidas Podemos, hasta que se presente su propia plataforma política, crece en la encuesta de diciembre y escala hasta los 30 diputados y el 12,1% de los apoyos, a solo cinco escaños de lo obtenido en las últimas elecciones.

El estancamiento de Más País (que no sobrepasa los dos diputados) y la influencia de Díaz en el Gobierno gracias a la recientemente aprobada reforma laboral (que le ha valido para recuperar 364.000 votantes), deja al PSOE con el ojo hacia su principal perseguidor en la izquierda.

Mes a mes, los socialistas han visto una ligera pérdida de apoyo del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, fruto de la inflación, la subida de la luz o el decreto de las mascarillas en exteriores. Sánchez se deja en un mes el 1,9% de sus votantes (unas 460.000 personas). En este medio te hemos contado en repetidas ocasiones que el temor a un sorpasso de Díaz es una realidad muy alejada según las encuestas internas del Gobierno. Sin embargo, desde Moncloa son conscientes de la importancia de no dejar nada al azar, de ahí a haber opacado en repetidas ocasiones a la líder de UP.

Sanchez necesitaría de los nacionalismos radicales para gobernar

La aritmética parlamentaria que sustenta en la actualidad al Gobierno sería insuficiente. La suma de PSOE, UP, ERC (13), Más País, PNV (7), Bildu (5), Compromís (1), Coalición Canarias y Nueva Canarias (1), PRC (1) y Teruel Existe (1) no alcanza los 176 diputados que abren la puerta de la mayoría absoluta en el Congreso (163).

Es por esto que el PSOE, en caso de liderar este bloque, se vería obligado a buscar aliados en las formaciones nacionalistas más radicales del Parlamento. Es en este ámbito donde el BNG (4), Junts (7) o la CUP (4) pasan a ser una alternativa a la que tener en cuenta de cara al futuro.

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