THE OBJECTIVE
Fútbol

'Vergüefa': bienvenidos al mayor escándalo del fútbol moderno

El sorteo de octavos de final de la Champions League se tuvo que repetir por una serie de errores a la hora de colocar las bolas de los equipos

‘Vergüefa’: bienvenidos al mayor escándalo del fútbol moderno

Andrey Arshavin sacando la papeleta del Manchester United. | Richard Juilliart (EFE)

Bochorno, chapuza, esperpento, bodrio, cutrez… Podría llenar un párrafo entero (des)calificando el inaudito sorteo de Champions League llevado a cabo por la UEFA, pero lo cierto es que no es necesario. Ya lo hacen ellos solos. El ridículo a ojos del fútbol mundial ha sido épico y como añade Emilio Butragueño: «Sorprendente, lamentable y muy difícil de entender».

De verdad que no era tan complicado. Las directrices del evento son muy básicas: dieciséis bolas de plástico con sus correspondientes papelitos dentro. Los primeros de cada grupo tienen que enfrentarse obligatoriamente a los segundos de los grupos contrarios y nunca contra equipos de su mismo país. Fin. Pues algo falló. El máximo organismo europeo achaca el desastre a «un problema con el software». En el Real Madrid directamente «no se creen las explicaciones». Como para darles credibilidad. El sainete de este lunes estuvo más cerca del sorteo de la Liga de mi barrio que del que uno espera de una institución que presume de intachable, pulcra e infalible y que ha quedado a la altura del betún.

Quilombo en ‘Uefaland’

Todo preparado en ‘Uefaland’. Cada bola en su urna correspondiente. Sale el primer cruce y toca un Benfica vs Real Madrid. Hasta aquí todo correcto. El evento iba como la seda. Los blancos respiran tranquilos. Es con el segundo duelo y con el baile de bolas entre urnas cuando empieza el quilombo. Turno para el Villarreal que queda emparejado… ¡Con el Manchester United! Imposible, pensamos todos, pero si vienen de jugar en el mismo grupo de clasificación. Lío montado.

La cara de Giorgio Marchetti, vicesecretario de la UEFA, era un poema. La de Arshavin, el exfutbolista ruso encargado de desenroscar las esferas viraba entre el sonrojo y la risa floja. Alguno pensó que el show debía continuar, reordenó las bolitas y volvió a meter la gamba. Entre tanto cambio, el comisario de la Champions League introdujo la pelotita del Liverpool en el bombo del Atleti. Otro error garrafal. ¡También habían coincidido en el grupo clasificatorio! Un desastre, un sinsentido que llega a su fin (con todos los equipos sorteados) entre un aluvión de quejas. Tal es el escándalo que la UEFA decide «dejar desierto el sorteo» y repetirlo a las 15 horas.

«Adulteración de la competición»

El Atlético de Madrid (que entre tanto dislate había quedado emparejado con el Bayern de Múnich) encabezó las protestas. Rápidamente me puse en contacto con el Real Madrid. Desde Chamartín entendían la reclamación colchonera (y del resto de equipos) pero con matices insalvables: «Repetir el sorteo completo y no a partir de nuestro emparejamiento es otra adulteración de la competición tan flagrante como las que se han producido después. Nos hemos dirigido a la UEFA para expresar nuestra postura. Es inadmisible la repetición completa».

Las quejas blancas no sirvieron de nada. La lotería futbolística se repetiría a las 15 horas y el bombo, que es muy caprichoso, tenía reservado ‘el gordo’ para los blancos. PSG vs Real Madrid. Nada más y nada menos. De enfrentarte a un ‘cómodo’ Benfica a verte las caras con Mbappé, Messi, Neymar y Sergio Ramos en un abrir y cerrar de ojos. El morbo está servido y la indignación desde Concha Espina es sideral.

Superliga ya

Es inevitable pensar que de existir otras relaciones entre la UEFA y el Real Madrid, las reclamaciones presentadas por el club que dirige Florentino Pérez habrían sido escuchadas. La Superliga es un molesto telón de fondo ante el monopolio establecido por Aleksander Ceferin desde su cuartel de Nyon. El esloveno rumia su enfado después del grotesco espectáculo que ha dado la institución que preside ante los ojos del fútbol mundial.

Punto para el Madrid en su relato contrario a los anquilosados organismos que rigen el deporte Rey, pero nulo consuelo. La indignación a estas horas en la casa blanca sigue siendo mayúscula. Alguien desde dentro me planteaba lo siguiente: «¿Te imaginas la situación contraria, Nacho? Que de primeras nos hubiera tocado el PSG, se repitiera el sorteo y nos tocara el Benfica. ¿Qué se estaría diciendo?». No hace falta hacer mucho esfuerzo. Ustedes y yo lo sabemos. De bolas calientes para arriba y me estoy quedando corto. El Madrid está harto de la UEFA. Tanto, que desde dentro ya califican a este vodevil como ‘Vergüefa’.

También te puede interesar
Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D