70 años del fin de la Segunda Guerra Mundial

Miles de españoles fueron exterminados en varios campos, destacando Mauthausen, Ravensbruck, Gusen y los túneles de Ebensee, donde se fabricaba material de guerra en condiciones infrahumanas.

Durante el invierno y la primavera de 2015, los campos de concentración que el Tercer Reich construyó a lo largó y ancho de sus dominios, conmemorarán el 70 aniversario de su liberación.

Sin ánimo de entrar en política ni de ofender sensibilidades, sigo planteándome diez años después de rodar el documental ‘Lágrimas Rojas’ en varios campos de exterminio, varias preguntas. Desconozco los motivos exactos, pero inmersos en pleno siglo XXI, todavía me extraña porque España sigue sin reconocer en las ceremonias de homenaje y conmemoración el papel de los republicanos españoles que dieron su vida en la Segunda Guerra Mundial. Algunos participaron en la liberación de Paris, otros lucharon en Narvik (Noruega) y muchos colaboraron con la resistencia francesa, solo por poner unos ejemplos…

Miles de españoles fueron exterminados en varios campos, destacando Mauthausen, Ravensbruck, Gusen y los túneles de Ebensee, donde se fabricaba material de guerra en condiciones infrahumanas. Por no hablar del castillo de Harthaim, donde perecieron muchos españoles víctimas de experimentos atroces.

Desde la llegada de la democracia, solo un presidente en España se ha dignado a visitar varios campos y rendir homenaje a los republicanos que murieron en Mauthausen, fue Zapatero en mayo de 2005, un servidor fue testigo del acontecimiento en primera persona. Ni Suárez, ni González, ni Aznar, ni Rajoy han participado en actos oficiales de homenaje, ni ministros de justicia o defensa. Por lo que observo, Rajoy no tiene previsto realizar ningún viaje de homenaje a los campos nazis. ¿Acaso no es suficiente la información gráfica que facilitó el fotógrafo y prisionero Francisco Boix, autor de algunas de las más impactantes imágenes sobre el cautiverio y la liberación de Mauthausen y único testigo español en Nuremberg?.

Francia acogió a muchos republicanos, con los años reconoció su aportación a la causa, les dio un pasaporte y una pensión, pero con la llegada de la democracia, muchos deportados y sus familiares siguen pidiendo a los gobiernos españoles una mayor implicación.