THE OBJECTIVE
Teresa Viejo

El país de los sobres

El último se intuye entre la maleza, tras un mojón que indica el cruce de caminos hacia ninguna parte. Cuatro esquinas para despistar al más listillo. Para agudizar la vista y dar con algo que si bien no te saca de pobre, te endulzaría el día de encontrarlo.

Opinión
Comentarios
El país de los sobres

El último se intuye entre la maleza, tras un mojón que indica el cruce de caminos hacia ninguna parte. Cuatro esquinas para despistar al más listillo. Para agudizar la vista y dar con algo que si bien no te saca de pobre, te endulzaría el día de encontrarlo.

El último se intuye entre la maleza, tras un mojón que indica el cruce de caminos hacia ninguna parte. Cuatro esquinas para despistar al más listillo. Para agudizar la vista y dar con algo que si bien no te saca de pobre, te endulzaría el día de encontrarlo. Ayer apareció encaramado a una parada de autobús y anteayer pegado a una boca de riego. Son simples sobres con cuatro letras garabateadas a bolígrafo y como remite @HiddenCash, el alter ego en Twitter de un filántropo justiciero. También anónimo. Dentro un puñado de billetes entre 10 y 100 dólares. De estos, pocos. Esta historia de trazos novelescos –el anuncio en la red social de la existencia de un sobre con dinero, abandonado estratégicamente en un lugar público de San Francisco- fue creciendo pareja a la intriga de una serie de tv. ¿Quién habría tenido la feliz idea de compartir su fortuna con el vulgo así… de poco en poco? ¿Sería motu proprio o encargo de un benefactor en la sombra? ¿Existen almas blancas capaces de no cenar caviar una noche para que los del extrarradio pidan una extra de queso? ¿Es hombre, mujer o pescado? ¿Estado civil?

De momento nada se sabe, salvo que el avatar de la cuenta es prosaico y ramplón: un pulgar masculino que acaricia un abanico de dólares. Sin atisbos de romanticismo ni lírica. Dinero al dinero, quid pro quo: tú me haces un follow y yo te regalo una pista para que busques el sobre. Y en el enredo llevan varios días hasta alcanzar los 165.000 followers y extender su adictivo juego a otras localidades de California. Como ando justa de inocencia creo que detrás anda una campaña viral, pero por si acaso: no saben ustedes la de cruces de calles que tenemos en Madrid. 

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D