Sánchez se inclina por no colocar ministros en las candidaturas del PSOE en Madrid

Se acabaron los experimentos con gaseosa. Pedro Sánchez tiene clara la hoja de ruta para Madrid en las próximas elecciones. Nada de fichajes estrella. El secretario general del PSOE descarta una crisis de Gobierno, lo que acaba de raíz con el casting de ministros para liderar las candidaturas del partido. Juan Lobato y Mercedes González parten como favoritos para encabezar las lista a la Asamblea y al Ayuntamiento de la capital, aunque deberán superar unas primarias. El caso de la segunda genera más dudas en Ferraz, pero la apuesta parece decidida tras las pasadas experiencias con los denominados paracaidistas.

Sánchez anunció su decisión al líder regional antes de marcharse de vacaciones, indican fuentes socialistas. El propio Lobato ha declarado ya su intención de concurrir a las primarias. El PSOE aprobó a finales de julio el calendario para elegir a los candidatos para las elecciones de mayo. La presentación de candidaturas se realizará en apenas unas semanas, entre el 19 y el 20 de septiembre. Los pretendientes tendrán una semana para recoger avales. La primera votación se celebrará el 9 de octubre.

El equipo de Lobato confía en que sea el único aspirante, lo que le convertiría automáticamente en candidato a la Comunidad de Madrid. Ese escenario supondría un auténtico espaldarazo, ya que demostraría su fuerza como líder de una federación donde las diferentes familias han protagonizado no pocos terremotos políticos. Uno de ellos, el Tamayazo, privó en 2003 a los socialistas de recuperar el gobierno regional después de que dos diputados se abstuvieran en la investidura de Rafael Simancas.

La decisión de Sánchez

Lobato, técnico de Hacienda de 37 años, se convirtió en alcalde de Soto del Real en 2015. El primer regidor socialista de esta localidad de 8.600 habitantes enclavada en la sierra madrileña desde la restauración democrática. Dejó el cargo en abril de 2021 para acompañar a Ángel Gabilondo en su asalto al gobierno regional. Los malos resultados precipitaron los cambios. Lobato se convirtió en secretario general tras imponerse en primarias a Javier Ayala, alcalde Fuenlabrada.

Pocos dudan de sus capacidades en la formación. Ni siquiera sus detractores. Eso sí, advierten de que tendrá una ardua misión: competir con Isabel Díaz Ayuso. «Ferraz barajó la opción de imponer a un paracaidista, pero nadie quería venir a Madrid. No solo por Ayuso, también porque el partido corre el riesgo de volver a quedar por detrás de Mónica García. Pero Juan no tiene miedo», admite un dirigente nacional. El PSOE dejó de gobernar la región hace 27 años. En las últimas elecciones se convirtió en la tercera fuerza de la Asamblea, por detrás de PP y Más Madrid.

«Hay que ir paso a paso. Lobato ahora debe recuperar la segunda plaza. Si las encuestas aciertan y Alberto Núñez Feijóo llega a La Moncloa, Ayuso no va a tener con quien rivalizar y el PSOE recuperará la región en 2027», sostiene un histórico socialista madrileño. Otro dirigente avisa de que Lobato tiene claro que debe ser el candidato en mayo. «Se va a presentar a las primarias diga lo que diga Sánchez. Eso ha podido convencer al presidente para desistir de su intención inicial».

Las experiencias pasadas también han influido. Gabilondo no pertenecía al partido cuando se presentó en 2015 contra Cristina Cifuentes. A pesar de que el PP vivía horas bajas, volvió a llevarse el gato al agua. El actual Defensor del Pueblo consiguió la victoria en las elecciones de 2019, pero no le bastó para gobernar. En la repetición electoral de mayo de 2021 obtuvo los peores resultados regionales del PSOE. Días más tarde, mientras se recuperaba de una afección coronaria en el hospital, renunciaba al acta de parlamentario.

El fichaje de Pepu Hernández

La situación es más preocupante en el Consistorio, donde los socialistas son ahora cuarta fuerza, solo por delante de Vox. La primera decepción se la llevaron en las elecciones de 2015, cuando Antonio Miguel Carmona solo consiguió nueve concejales. No entraron en el gobierno municipal, pero sus votos sirvieron para convertir en alcaldesa a Manuela Carmena, de Ahora Madrid. La izquierda recuperaba el poder en la capital tras 26 años en la oposición, pero el PSOE se quedaba muy lejos de las expectativas.

Sánchez quiso paliar el golpe electoral en 2019 con un fichaje estrella. El elegido fue el exseleccionador nacional de baloncesto, Pepu Hernández. Sin embargo, el resultado volvió a ser «desastroso», al obtener solo ocho concejales, uno menos que con Carmona. Hernández renunció al acta en septiembre del año pasado. Le acusaron de desconocer el terreno y tener poco carisma. Muchos socialistas alzaron entonces la voz y pidieron a Ferraz acabar con los paracaidistas.

Los militantes madrileños llevan meses preocupados por los rumores que apuntan al desembarco de un nuevo fichaje estrella. Los nombres que han salido a la palestra son los de los ministros Margarita Robles, Fernando Grande-Marlaska, Reyes Maroto y Pilar Llop. También ha aparecido el de Félix Bolaños, aunque en este caso parece poco probable. El propio Sánchez ha tenido que salir al paso de los rumores. Ha descartado una crisis de Gobierno pensando en las elecciones.

«No tiene por qué ser un ministro. Conociendo a Sánchez, quizás tenga guardada una sorpresa», explica un alto cargo socialista. En su opinión, el presidente del Gobierno se marchó de vacaciones sin decidir quién encabezaría la candidatura en el Ayuntamiento de la capital. La opción más probable es la de Mercedes González. «Por eso la nombraron delegada del Gobierno en 2020 y para eso la auparon en noviembre a la secretaría general de la recién creada Agrupación Socialista de la Ciudad de Madrid», afirma un destacado dirigente. No obstante, ella no se ha postulado todavía.

Encuestas internas

González, periodista de 47 años, fue secretaria general del PSOE en el distrito de Barajas. En las municipales de 2015 fue como número cuatro en la lista. Se desempeñó como portavoz de Desarrollo Sostenible durante la legislatura. En la siguiente cita electoral, cuando muchos apostaban a que lideraría la candidatura, ocupó el número dos, por detrás de Pepu Hernández. Su entorno revela que llevaba el peso político del grupo municipal. «Mercedes conoce el terreno y es muy buena en las distancias cortas», destaca un antiguo colaborador.

Sus posibilidades se han resentido porque los informes de Ferraz demuestran que «no tira». Y eso, a pesar de que la dirección se ha afanado en construir un escenario óptimo, revelan fuentes socialistas. Otros dirigentes rechazan esa explicación. Alegan que González no se ha postulado aún y que atraerá el foco mediático cuando eso ocurra. «Hasta ahora, su cargo de delegada del Gobierno en Madrid le ha obligado a actuar de forma institucional», afirma un destacado socialista. La excepción, los encontronazos que ha protagonizado con José Luis Martínez-Almeida, con quien mantiene una buena relación.

En Ferraz hay voces que intentan convencer a Sánchez para que movilice «a un primer espada» aprovechando las horas bajas del alcalde de la capital. Sin embargo, la apuesta por González es de largo recorrido y parece decidida. «Los fichajes estrella abandonan el proyecto cuando vienen mal dadas. Mercedes no lo hará. Es una municipalista convencida», resalta un antiguo colaborador.

«No ha habido ningún movimiento. El asunto de los paracaidistas se basa en rumores y más rumores», sostiene un importante dirigente madrileño. En su opinión, la secretaria general de la ciudad es la persona que representa a los socialistas madrileños. Además, valora su conocimiento de las tareas municipales porque fue concejal durante seis años. Hay quien incluye en la ecuación a las ediles Mar Espinar y Emma López. La primera aún no ha decidido si concurrirá a las primarias, mientras que a López le penaliza su apoyo a Ayala en las primarias de octubre.

La candidatura de González

Otras fuentes consultadas por THE OBJECTIVE admiten que, a pesar de que Adriana Lastra ha abandonado la dirección, González mantiene importantes valedores en el partido. Gente como Bolaños y Simancas que «susurran a Sánchez». Un importante dirigente madrileño afirma que la actual delegada del Gobierno quiere ser candidata, pero que asumirá la decisión del presidente del Gobierno. «No pondrá problemas porque ella es una persona de partido».

«Sería bueno que hubiese varios candidatos. Eso serviría para tener un debate abierto ante la sociedad», opina Manuel de la Rocha. El exalcalde de Fuenlabrada no revela si aspirará a alguna candidatura. En 2019 ya se enfrentó a Pepu Hernández. Tampoco aclara a quién apoyará en este proceso, pero insiste en que apostar por un paracaidista no es una buena decisión porque «no ha funcionado en los últimos años». Y concluye: «Pepu fue un fiasco y creó un conflicto interno. Dimitió y seguimos huérfanos. Para presentar a alguien de fuera hay que pensárselo mucho».