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Una niña británica de tres años registra un cociente intelectual superior a Einstein

Una niña británica de tres años ha registrado un cociente intelectual de 171 puntos, cociente que supera al de Albert Einstein o Stephen Hawkings. Se llama Ophelia Morgan-Dew y es capaz de recordar cosas que le pasaron antes de cumplir un año año de edad, según han informado este jueves diversos medios locales.

Una niña británica de tres años registra un cociente intelectual superior a Einstein

Una niña británica de tres años ha registrado un cociente intelectual de 171 puntos, cociente que supera al de Albert Einstein o Stephen Hawkings. Se llama Ophelia Morgan-Dew y es capaz de recordar cosas que le pasaron antes de cumplir un año año de edad, según han informado este jueves diversos medios locales.

Este cociente intelectual supera con 71 puntos la puntuación media de la población, que es de 100, encontrándose la mayoría entre los 85 y los 115 puntos.

La pequeña se ha convertido en la persona más joven del Reino Unido que logra entrar en la sociedad para superdotados Mensa y se encuentra en el primer 0,03% de la población en términos de «poder cerebral». «Cuando nuestra hija tenía unos ocho meses, nos dimos cuenta de lo brillante que podía ser», ha reconocido su madre, Natalie Morgan, a la cadena británica BBC. «Empezó a decir los colores, las letras y los números muy pronto, en comparación con la mayoría de los niños», ha añadido.

Sin embargo, no fue hasta que la pequeña comenzó la guardería cuando los progenitores fueron conscientes de la situación. En ese momento, Natalie y su pareja, Ben Dew, decidieron llevar a Ophelia a un psicólogo especializado en niños superdotados. «Solo queríamos averiguar cómo podíamos ayudarla», ha explicado su padre, quien ha reconocido que no querían forzarla pero al mismo tiempo no querían que se sintiera poco estimulada.

A pesar de su alto cociente intelectual, sus padres aseguraron que la menor «es una niña de tres años en muchos otros sentidos». «Le gusta corretear y jugar con sus primos, saltar en colchonetas… Cosas normales en un niña a esa edad», ha explicado Dew. Sin embargo, ha asegurado que la diferencia con el resto de niños es que comprende y asimila todo más rápido.

«Es como hablar con una persona de 19 años. Se puede mantener con ella una conversación adecuada, desarrolla sus propias ideas», ha añadido el padre de la menor. «Estaré orgullosa de Ophelia sin importar qué decida hacer, solo queremos que esté sana y sea feliz», ha reconocido la madre.

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