Ferrovial es una de las empresas más destacadas de las últimas décadas, no solo en España, sino en todo el mundo, donde ha logrado crear reputación, gracias a la calidad tanto técnica como estética de sus obras. A lo largo de todo el orbe la compañía fundada por Rafael del Pino ha realizado miles de obras de gran calado que han construido la reputación de la empresa hasta elevarla a uno de los operadores de infraestructuras más importantes.
Ferrovial cumple este año siete décadas de vida y la evolución de la compañía ha sido palpable. Desde sus inicios, realizando actuaciones de arreglos de vías, con hitos como la construcción de la primera carretera construida con capital privado en España, hasta grandes construcciones realizadas en los últimos años como la ampliación de la 407 ETR en Canadá, considerada la mayor carretera del mundo; Ferrovial ha ido puliendo su ‘obra’, que ahora estará recogida en el Espacio Fundación Telefónica para que el público general pueda comprobar los trabajos realizados por la constructora en sus años de vida.
El fotógrafo José Manuel Ballester, Premio Nacional de Fotografía 2010, ha elaborado un retrato de la compañía a través de sus principales actividades y obras en todo el mundo. Ballester ha recorrido durante un año más de 30.000 kilómetros para visitar unos 50 proyectos en Australia, Polonia, Francia, Reino Unido, España, Estados Unidos, Canadá, Colombia, Perú y Chile. Este periplo le ha permitido aportar su particular visión de pintor y fotógrafo sobre las estructuras, edificios y espacios desarrollados por Ferrovial.
La muestra exhibe grandes imágenes de autopistas en Dallas, Toronto, Toowoomba o Virginia; aeropuertos en Londres o Glasgow; puentes en Canadá o Eslovaquia, además de conjuntos históricos como la Plaza Mayor de Madrid o el Palacio de Cristal; túneles bajo el Támesis o Los Andes, y el ITER, en Francia.
Arquitectura e ingeniería
Las imágenes de José Manuel Ballester utilizan la arquitectura y la ingeniería para visibilizar de forma elocuente el paradigma de la modernidad del mundo contemporáneo, materializando la capacidad del ser humano de afrontar retos cada vez más grandes y de forjar un futuro que satisfaga las necesidades de la sociedad en un contexto, como el presente, en movimiento, innovación y progreso constantes.
En las fotografías del artista existe siempre un gran equilibrio entre el retrato de la obra técnica y la mirada particular del autor. Los elementos se presentan desde una dimensión que podríamos considerar metafísica, porque trasciende lo racional e indaga en la tensión entre lo concreto y lo abstracto que se oculta en toda forma o paisaje.
La selección de las comisarias completa un mapamundi muy diverso que ofrece una gran información sobre cómo la ingeniería interviene en la naturaleza para adaptarla a las necesidades del ser humano. Recoge distintas formas de obtener energía, mecanismos de movilidad e infraestructuras, por mencionar algunos ejemplos, que posibilitan la habitabilidad en las grandes poblaciones, minimizando el impacto medioambiental.
Así, las fotografías dan pie a crear un diálogo entre el mundo del arte y el de las infraestructuras, entre una visión estética y otra científica o tecnológica. Según explica el propio fotógrafo, «cada artista tiene su mirada, su manera de afrontar el mundo, de posicionamiento en el mundo. Al trabajar con estas fotos he procurado dejar la presencia humana aparte y he tratado de plasmarla a través de sus huellas», indica José Manuel Ballester.
Una imagen de la simetría de un conjunto de pilares o la regularidad de un sistema de cubiertas evoca los meses de cálculo de la estructura y las noches sin dormir de los responsables de la obra para su correcta ejecución. La precisión en el trazado de una autopista, su geometría y la fluidez de su tráfico hacen visible el esfuerzo para el encaje de coste, plazo, seguridad y responsabilidad medioambiental.
«Cuando conduzco por una autopista o cuando abro el grifo, ahora sé que detrás hay todo un despliegue tecnológico y un esfuerzo al servicio del ciudadano. Yo creo que esto no se conoce lo suficiente. Con mi trabajo intento también explicar eso, valorar el esfuerzo. Por ejemplo, el proyecto de saneamiento a través de todo el trazado del Támesis es una obra descomunal. O el aeropuerto de Heathrow, que es uno de los aeropuertos con mayor tránsito del mundo», agrega Ballester en el catálogo de la exposición, que cuenta con la participación de grandes firmas como Norman Foster o Elvira Lindo.
Firmas de calado
Con motivo de la exposición que celebra el 70 aniversario de la compañía, Ferrovial ha editado un libro que cuenta con la colaboración de importantes miembros de la sociedad civil. Entre sus páginas se puede encontrar a gente de la órbita de Ferrovial como el arquitecto Norman Foster o a otras personalidades más alejadas del oficio que la empresa representa, como Elvira Lindo.
La escritora gaditana, Elvira Lindo, ha querido destacar la capacidad de trabajo del autor de las imágenes que logra captar, a su juicio, las diferentes dimensiones desde la cual se puede captar una obra arquitectónica de gran calado, aspectos que van desde el tamaño, al tiempo o su funcionalidad.
«Retratar el espacio y el detalle a un tiempo, la perspectiva de lo inmenso y su meticuloso esqueleto, las extraordinarias trampas a las que los volúmenes someten al ojo humano, entraña una dificultad formidable que solo una mirada experta sabe sortear», explica Elvira Lindo en el catálogo.
Por su parte, el célebre arquitecto británico, Norman Foster, ha resaltado sobre la exposición las analogías que se pueden desprender de las fotografías y de la propia idiosincrasia de la empresa, donde los recursos, las distintas habilidades de la gente que compone Ferrovial, su buen hacer y su capacidad de trabajo son los pilares que ayudan a sustentar la gran ‘obra’ en la que se ha convertido la compañía.
«El acto de construir a lo largo del tiempo y su resultado tangible han de contemplarse como la punta del iceberg; los podemos ver y experimentar. Lo que no se pone de manifiesto, lo que queda bajo la superficie, es la combinación de diferentes disciplinas, la puesta en común de recursos, colaboraciones y trabajo en equipo. Estos son también los valores en los que se apoya toda organización y en especial Ferrovial: son el equivalente intelectual de los sólidos cimientos que sustentan una poderosa estructura», asevera Norman Foster en el catálogo.
La selección de proyectos, recreada por Ballester, refleja la versatilidad, adaptación y vocación internacional de Ferrovial, que se ha convertido en un referente de calidad y eficiencia en la promoción, construcción y gestión de infraestructuras en el mundo.
Ferrovial es una de las empresas con dimensión y liderazgo globales que acreditan la presencia española en los mercados internacionales. Una empresa familiar, creada en 1952, que ha realizado todo el recorrido hasta la condición de multinacional sin pérdida del carácter original. La compañía sigue manteniendo, setenta años después, el carácter innovador y emprendedor que marcó su nacimiento.