El 4% del presupuesto total dedicado a la investigación en España se invierte en la lucha contra el cáncer, según datos de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC). En este sentido, la financiación de proyectos por parte de entidades privadas, como hace la Fundación Mutua Madrileña desde hace 20 años con su Convocatoria Anual de Ayudas a la Investigación en Salud, se torna cada vez más indispensable.
Cada año se detecta un cáncer en España a una media de 280.000 personas, mientras que en el mundo se detectan ya casi 18 millones. A pesar de que se han logrado reducir significativamente las tasas de mortalidad entre los que padecen esta enfermedad, mejorar la supervivencia en cáncer sigue siendo uno de los grandes desafíos que la medicina moderna tiene por delante.
La investigación es la única vía que ha demostrado eficacia para curar o cronificar el cáncer, tal y como se recuerda en el Día Mundial contra el cáncer, que se celebra hoy 4 de febrero. La investigación médica es de vital importancia en oncología, pero también en el resto de especialidades médicas. Consciente de ello y con el propósito de mejorar la vida de las personas, desde 2004 la Fundación Mutua Madrileña convoca cada año sus Ayudas a la Investigación en Salud para financiar estudios clínicos en hospitales de toda España.
Y es que la investigación se ha convertido en la piedra angular del remedio para acabar con esta enfermedad, que cada vez afectará a más gente por las condiciones de vida y distintos factores que afectan al desarrollo de los tumores, como es la propia edad en sociedades que cada vez aspiran a ser más longevas.
Las tasas de mortalidad de la enfermedad siguen siendo preocupantes, ya que el cáncer es la tercera causa de muerte prematura en España. Hasta 113.000 ciudadanos pierden la vida en la lucha contra esta dolencia. En el mundo cifra se eleva hasta las 9.958.000 personas, y se estima que para 2040 el número de fallecimientos ascienda en nuestro país hasta los 341.000 -un 21,17% más-, mientras que a nivel global aumenta hasta los 16.300.829 -un 49,2% más-.
Es por esto que desde la Fundación Mutua Madrileña se busca profundizar más en la investigación. En esta convocatoria, que se mantendrá abierta durante febrero, los proyectos seleccionados contarán con una dotación total de 2,3 millones de euros. Además de la oncología, que cada año se centra en un tipo de tumor y que en esta ocasión será la inmunoterapia en cáncer, la fundación destinará sus ayudas a iniciativas médicas en el área de los trasplantes, las enfermedades raras que se manifiestan en la infancia, la traumatología y sus secuelas y, como novedad este año, a la salud mental juvenil.
Un comité científico de reputados especialistas, que preside el doctor Rafael Matesanz, será el encargado de determinar qué proyectos serán los financiados finalmente en función de criterios de experiencia investigadora del investigador principal y el equipo, calidad científica, viabilidad, aplicación práctica y el impacto social que se espera de los resultados.
En estos 20 años, la Fundación Mutua Madrileña ha destinado más de 65 millones de euros de forma desinteresada a la puesta en marcha de más de 1.400 proyectos de investigación. Algunos de ellos han permitido avances en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades, entre otras, las oncológicas. Un ejemplo es el estudio que en Valencia que llevaron a cabo los equipos de los doctores Carlos Camps y Antonio Pineda, y que permitió aplicar la metabolómica en el descubrimiento de nuevos biomarcadores para detectar el cáncer de pulmón, lo que abría la puerta a detectar la enfermedad en una muestra de sangre, de una forma mucho menos invasiva y costosa que en la actualidad.
Avances como el de la detección de la enfermedad en pruebas poco costosas son vitales a la hora de aumentar las tasas de supervivencia de las personas que padecen estos tumores, y en especial entre los pacientes de cáncer de pulmón, ya que se estima que entre los pacientes de este tipo de cáncer que tienen un diagnóstico tardío solamente sobreviven el 5% de ellos una vez pasados cinco años desde que se detecta.
La investigación médica es de vital importancia en oncología, pero también en el resto de especialidades médicas
El diagnóstico tardío no solamente complica las posibilidades de supervivencia de una persona con cáncer de pulmón. En tumores como los que afectan al páncreas la tasa de supervivencia a los cinco años es extremadamente baja, lo que le convierte en uno de los más mortales y uno en los que la investigación se hace más vital.
Pero los logros conseguidos gracias a la financiación de la Fundación Mutua Madrileña no se quedan ahí. Otro caso es el de la doctora Houria Boulaiz, que recibió una ayuda para investigar en una molécula candidata para cáncer ginecológico en 2016. Ella es Catedrática de la Universidad de Granada y miembro del grupo de investigación ‘Terapias avanzadas: Diferenciación, Regeneración y Cáncer’. También pertenece al Instituto de Investigación Biosanitaria de Granada (IBS Granada) y a la Unidad de Excelencia ‘ModelingNature: from nano to macro’ de la UGR.
Con la financiación, logró desarrollar un sistema de terapia génica para el cáncer capaz de frenar la proliferación de células de diferentes tipos de tumores, tales como el colorrectal, el de cérvix y el de mama, tanto in vitro como in vivo, deteniendo de esta forma el crecimiento del cáncer. Este sistema, basado en la toxina LdrB, fue patentado y descrito en la revista científica Cancers.
Este otro tipo de investigaciones ayudan a luchar con más armas contra muchos tipos de cáncer distinto, lo que hace de estos estudios algo indispensable, ya que, volviendo a las duras y frías cifras las tasas de supervivencia en España, estas se reducen entre los hombres hasta el 55,3%, mientras que en las mujeres asciende ligeramente hasta el 61,7%.
Es por esto fundamental que haya estudios que siguen actualmente en marcha, gracias a la fundación. El año pasado, en la XIX Convocatoria, Mutua Madrileña concedió ayudas para investigar 21 proyectos a grupos de 19 hospitales españoles. Algunos de ellos, en oncología, como el que la doctora Marina Paradela coordina desde el Instituto de Investigación Biomédica de La Coruña.
Ella es cirujana torácica del Centro Hospitalario Universitario de La Coruña (Chuac) y trabaja en colaboración con equipos de otras comunidades autónomas para profundizar en el conocimiento de las mejores técnicas quirúrgicas para extirpar un tipo de tumor pulmonar. La colaboración entre grupos de distintas comunidades autónomas es otra de las formas de investigar que impulsa la Fundación Mutua Madrileña con sus ayudas. En el caso del estudio de la doctora Paradela, el trabajo en colaboración permite, por un lado, lograr una muestra lo suficientemente grande como para que los resultados sean relevantes y, por otro, «evitar que la variable ‘cirujano’ sea un factor de confusión», explicaba la doctora.
El esfuerzo colectivo en la lucha contra el cáncer tiene que continuar su profundización a lo largo de los próximos años, ya que desde el 2016 solamente el 4% de las investigaciones del ámbito sanitario están circunscritas a esta área. Es por esto que proyectos como los de Fundación Mutua Madrileña se hacen tan indispensables, así como la ambición de alcanzar la cura por parte de los profesionales fundamental.
Por ello, hasta el próximo 2 de marzo los investigadores asociados a un instituto de investigación de un hospital público español pueden presentar sus proyectos en www.fundacionmutua.es, tanto en inmunoterapia en cáncer, como en el resto de especialidades que se recogen en esta decana iniciativa de financiación privada de la investigación.
