Agricultores y ganaderos tienen que hacer frente a numerosos riesgos que pueden afectar a sus explotaciones y, por tanto, a sus producciones. Ante esto, los seguros les permiten garantizar su protección.
De hecho, cada vez más estos profesionales consideran que el seguro agrario es un coste de producción más en su explotación, en tanto que no pueden permitir que toda su inversión y trabajo dependan de adversidades incontrolables, como es el caso de los fenómenos meteorológicos.
Consciente de ello, Unicaja Banco ofrece a agricultores y ganaderos seguros agrarios destinados a proteger y garantizar la producción y las instalaciones de sus explotaciones.
En el marco del acuerdo que mantiene con Caser, la entidad financiera pone a disposición del sector el Seguro Agrario Combinado (Agroseguro), focalizando en el último trimestre del año, entre otras líneas, las destinadas a vid, olivo, frutos secos y herbáceos.
El Seguro Agrario Combinado ofrece todas las coberturas y prestaciones que necesita una explotación agraria (agrícola, ganadera, forestal o acuícola), con las ventajas de que el cliente puede elegir el grado de protección que necesite, así como beneficiarse de un descuento directo en la póliza, al ser un seguro con subvención estatal y un pago adaptado a las necesidades del cliente.
Este producto está pensado sobre todo para dar respuesta a aspectos que ponen en peligro las explotaciones agrarias, tales como cambio climático, sequía o pedrisco. Los agricultores y ganaderos interesados en contratar este seguro pueden ponerse en contacto con las oficinas de la entidad financiera.
Compromiso con el campo
La comercialización de este seguro se enmarca en el arraigado compromiso de apoyo al campo por parte de Unicaja Banco, que se traduce en la prestación de servicios tanto financieros como de protección y asesoramiento, en el desarrollo de convenios específicos y en la participación en empresas del ramo.
De esta forma, los seguros agrarios se suman a la amplia y variada gama de productos y servicios que la entidad pone a disposición de agricultores y ganaderos, como son el anticipo de las ayudas de la Política Agraria Común (PAC) de la Unión Europea; la tarjeta Univerde, que ofrece la posibilidad de flexibilizar los pagos, y su tradicional línea de financiación para cultivos intensivos, entre otros.