Las varices son una afección común que afecta a muchas personas, especialmente a las mujeres. Aunque muchas veces se asocian con preocupaciones estéticas, las várices también pueden ser un asunto de salud importante. De hecho, pueden ser un indicador de problemas de salud subyacentes, como insuficiencia venosa crónica o incluso coágulos de sangre. De ahí la importancia de abordar las várices no solo por razones estéticas, sino también por su impacto en la salud y el bienestar general. Clínicas especializadas, como IML lo saben, y ofrecen servicios especializados enfocados en atender este problema.
Qué son las varices y por qué aparecen
Las varices son venas superficiales que se han dilatado y retorcido debido a un mal funcionamiento de sus válvulas internas. Se observan comúnmente en las piernas y pueden ser el resultado de una variedad de factores. La edad puede debilitar las válvulas venosas, al igual que los cambios hormonales y el embarazo.
La herencia genética también desempeña un papel importante, ya que algunas personas tienen una mayor predisposición a desarrollar varices. Los estilos de vida sedentarios y el sobrepeso también pueden contribuir a su aparición, puesto que la falta de movimiento y el exceso de peso pueden dificultar el flujo sanguíneo adecuado. Cuando las válvulas venosas se debilitan, la sangre puede acumularse en las venas, lo que lleva a su dilatación.
Impacto en la salud
Las varices tienen un impacto significativo en la salud. El dolor y la sensación de cansancio en las piernas son dos de las quejas más frecuentes asociadas con este problema. Estos síntomas pueden afectar la calidad de vida, limitando la movilidad y el confort diario de las personas afectadas.
En casos más graves, las varices pueden llevar a complicaciones que requieren atención médica inmediata. Una de estas complicaciones es la formación de úlceras varicosas, que se desarrollan debido a la mala circulación y la presión prolongada en las venas afectadas. Estas úlceras pueden ser dolorosas y difíciles de tratar, aumentando el riesgo de infecciones.
Otra complicación severa es la trombosis venosa, donde se forma un coágulo sanguíneo en una vena profunda, un estado conocido como trombosis venosa profunda. Este coágulo puede desprenderse y viajar a los pulmones, provocando una embolia pulmonar, una situación potencialmente mortal.
Innovaciones en el tratamiento de las varices
La evolución tecnológica en el campo médico ha revolucionado el tratamiento de las varices, ofreciendo soluciones más eficaces y menos invasivas. Estas innovaciones se centran en maximizar los resultados y minimizar el tiempo de recuperación y las molestias para los pacientes.
Una de las técnicas más destacadas es la terapia con láser endovenoso. Este tratamiento utiliza la energía láser para calentar y cerrar las venas varicosas desde dentro. La precisión del láser permite tratar las venas afectadas con mínima afectación a los tejidos circundantes, lo que reduce significativamente el dolor y el tiempo de recuperación.
Otra innovación es la escleroterapia guiada por ultrasonido, un procedimiento en el que se inyecta una solución directamente en las venas varicosas para colapsarlas y cerrarlas. La guía por ultrasonido incrementa la precisión del tratamiento, mejorando los resultados y disminuyendo las probabilidades de recurrencia.
Estas innovaciones no solo mejoran la eficacia del tratamiento de las varices, sino que también ofrecen a los pacientes opciones más cómodas para su tratamiento.