La empresa energética española Abengoa ha solicitado el concurso de acreedores ante un juzgado de Sevilla. Lo ha hecho tras no haber logrado reestructurar su deuda. Así lo ha comunicado la compañía a la Comisión Nacional del Merado de Valores (CNMV).
Lo más importante: a pesar de la solicitud del concurso de acreedores, la empresa asegura que se mantiene en su objetivo de «buscar alternativas» que puedan evitar la inviabilidad de las empresas filiales del grupo, tarea para la que pide «la máxima colaboración a todos aquellos que tienen intereses» en la firma.
«El Consejo de Administración, siendo consciente de la compleja situación y de las cada vez mayores dificultades para alcanzar una solución que satisfaga a todos los grupos de interés con posiciones, hasta ahora, enfrentadas, sigue comprometido en buscar alternativas para evitar la inviabilidad de las sociedades filiales que desarrollan la actividad del grupo y, con ello, preservar el empleo y tratar de minimizar la pérdida de valor, objetivo para el cual se solicita a todos aquellos que tienen intereses en la Sociedad y su grupo la máxima colaboración para tratar de evitar perjuicios definitivos», ha comunicado Abengoa a la CNMV.
El viernes pasado finalizó el plazo para que la compañía lograra un acuerdo con sus acreedores que le permitiera reestructurar su deuda y extender, por enésima vez, el plazo de la misma. Este mismo lunes, el consejo de administración de la empresa había anunciado una reunión inmediata al no haber obtenido dicha extensión, por lo que la refinanciación de la deuda ya no puede ejecutarse.