Dos muertos y un desaparecido por una ola gigante en Tenerife
Dos personas, un hombre de 35 años y una mujer de 60, han muerto en Tenerife después de recibir el golpe de una ola gigante en Tenerife, ha informado el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad. Los servicios de rescate buscan a una tercera persona, que continúa en paradero desconocido. El desaparecido es «un joven», según ha señalado un portavoz de la policía, sin dar más precisiones. Además de los dos fallecidos, «al parecer otra persona que se tiró al agua para intentar rescatarlos pudo salir por sus propios medios», según la misma fuente. El hombre fallecido es natural de Canarias, mientras que la mujer es una turista cuya nacionalidad no ha trascendido.
Dos personas, un hombre de 35 años y una mujer de 60, han muerto en Tenerife después de recibir el golpe de una ola gigante en Tenerife, ha informado el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad. Los servicios de rescate buscan a una tercera persona, que continúa en paradero desconocido. El desaparecido es «un joven», según ha señalado un portavoz de la Policía, sin dar más precisiones. Además de los dos fallecidos, «al parecer otra persona que se tiró al agua para intentar rescatarlos pudo salir por sus propios medios», según la misma fuente. El hombre fallecido es natural de Canarias, mientras que la mujer es una turista cuya nacionalidad no ha trascendido.
Las autoridades han desplegado un amplio equipo de rescate. En las labores han participado un helicóptero y una embarcación de Salvamento Marítimo, un helicóptero de rescate del Grupo de Emergencias y Salvamento (GES) del Gobierno de Canarias, los bomberos de Tenerife, la Policía Local, la Guardia Civil y una ambulancia de soporte vital básico y otra medicalizada del Servicio de Urgencias Canario (SUC). Además, este último organismo ha activado el Grupo de Apoyo del Colegio Oficial de Psicólogos de Tenerife.
El incidente fue captado en imágenes por un videoaficionado. En el vídeo, divulgado por el diario La Opinión de Tenerife, se muestra el momento en que una ola sumerge los peñascos de una de las piscinas naturales de Santiago del Teide, una de las atracciones turísticas de este archipiélago volcánico frente a las costas de África.