La Policía baraja posibles cargos de homicidio involuntario por el incendio de la torre Grenfell
La policía británica ha asegurado que están considerando cargos de homicidio involuntario en relación con el mortal incendio de la Torre Grenfell, que dejó 79 muertos o desaparecidos, ya que tanto el aislamiento como los azulejos en el edificio no habían pasado las pruebas de seguridad. La superintendente Fiona McCormack, de la Policía Metropolitana de Londres (Met, por sus siglas en inglés), ha confirmado también que el incendio comenzó, como apuntaba la principal hipótesis, al estallar una nevera defectuosa.
La policía británica ha asegurado que están considerando cargos de homicidio involuntario en relación con el mortal incendio de la Torre Grenfell, que dejó 79 muertos o desaparecidos, ya que tanto el aislamiento como los azulejos en el edificio no habían pasado las pruebas de seguridad. La superintendente Fiona McCormack, de la Policía Metropolitana de Londres (Met, por sus siglas en inglés), ha confirmado también que el incendio comenzó, como apuntaba la principal hipótesis, al estallar una nevera defectuosa.
La superintendente McCormack ha dicho que estaban tratando de llegar al fondo de por qué el fuego se inició tan rápidamente, y que la Policía, que ha confiscado documentos y materiales de un «número de organizaciones», estudia presentar cargos de homicidio. Tanto el aislamiento como los azulejos que se usaron en la construcción de la torre han sido probados, y «ambos han fracasado en las pruebas de seguridad». Los investigadores ahora tratarán de establecer si el uso de estos materiales era ilegal. «La policía investigará cómo los azulejos fueron fijados al edificio y su instalación».
La responsable policial ha indicado que la nevera era del modelo Hotpoint FF175BP y no era un producto que hubiera estado sometido a una retirada del mercado por temor sobre su seguridad. Según testigos, un residente había comentado a otros vecinos de la torre Grenfell que el fuego empezó por un problema con un enchufe. Según la reconstrucción de los hechos de los medios británicos, el fuego se originó en el apartamento de Behailu Kebede, en la cuarta planta de un total de 24.
Sobre el polémico revestimiento que tenía la torre, que al parecer contenía polietileno, altamente inflamable, McCormack se ha limitado a decir que no cumplía con «las pruebas de seguridad».
«Estamos mirando cada delito criminal desde homicidio para arriba, estamos mirando cada delito sobre seguridad y salud y de seguridad ante un incendio y estamos revisando en este momento cada compañía implicada en la construcción y remodelación de la torre Grenfell«, explicó la superintendente.
En el edificio, ubicado en el barrio de North Kensington y formado en su mayoría por apartamentos de protección oficial, vivían entre 400 y 600 personas.
Unos 600 edificios en Inglaterra tienen un revestimiento similar
Unos 600 edificios en Inglaterra tienen un revestimiento similar al de la torre Grenfell de Londres. La cifra ha sido divulgada después de que la primera ministra británica, Theresa May, declarase este jueves en el Parlamento que los inspectores han localizado pisos de protección oficial en condiciones similares a Grenfell, que ardió con rapidez debido a que su revestimiento tenía polietileno.
Las inspecciones individuales ya han confirmado que al menos siete de esos 600 bloques de pisos, que en general alojan a personas con pocos recursos económicos, tienen componentes combustibles, por lo que deberán ser reformados o inhabilitados. Una portavoz del 10 de Downing Street indicó que es un «asunto de urgencia» comunicar esta situación a los residentes.
En la Cámara de los Comunes, May señaló que los inspectores han localizado más viviendas con un revestimiento parecido, por lo que las autoridades tomarán medidas para garantizar la seguridad de esos inmuebles. May dijo que unos 100 edificios a diario son revisados en el Reino Unido y que todos los ayuntamientos británicos trabajan con los servicios de bomberos locales para tomar las medidas necesarias a fin de garantizar la seguridad de las viviendas.
El líder de la oposición laborista, Jeremy Corbyn, calificó la tragedia de Grenfell de «atroz» y recalcó que «cada una de las muertes podían y debían haberse evitado«.