El visionario 'número dos' del Gabinete de Sánchez
José Rama dijo en 2019 que Feijóo era «suficientemente inteligente para no embarcarse en ningún proyecto nacional»
Junto al flamante nuevo jefe de Gabinete en la Moncloa, Diego Rubio Rodríguez, despunta su ‘número dos’, José Rama Caamaño, quien empezó de asesor en la Oficina Nacional de Prospectiva y Estrategia de País en febrero de 2022 y en enero de este año fue ascendido a subdirector de Políticas Sociales, Asuntos Europeos y Prospectiva Estratégica, un área que ahora desaparece con la reestructuración del Gabinete en Presidencia.
Nacido en 1992 en la localidad gallega de Lariño y experto en nuevos partidos, a Rama Caamaño le preguntaron en El Correo Gallego hace cinco años por el futuro del entonces presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, y su vaticinio fue completamente erróneo.
«¿Crees que Feijóo encabezará algún día la lista de las generales?», le preguntó el periodista a finales de julio de 2019 a este investigador en Ciencia Política por la Universidad Autónoma de Madrid antes de su salto a tareas gubernamentales en la Moncloa. «Definitivamente no. Considero a Feijóo lo suficientemente inteligente como para no embarcarse en ningún proyecto nacional», fue su respuesta en un momento en el que Feijóo había rechazado dar el salto a la política española tras la moción de censura ganada por Pedro Sánchez y la dimisión de Mariano Rajoy al frente del partido.
«Siempre lo recalcó cuando habló de política autonómica, pero en el periodo 2015-2016 la única comunidad autónoma que consiguió mayoría absoluta fue Galicia, en un momento de cambio político sin precedentes», dijo Rama Caamaño sobre la que había sido la tercera holgada victoria de Feijóo al frente de la Xunta. Luego en 2020 vendría la cuarta mayoría absoluta.
El ‘número dos’ del Gabinete en Moncloa subrayó entonces que el entonces barón popular tenía cogido «el punto a la política» en su feudo gallego. «Ahora sabe cómo desmarcarse de sus compañeros de partido y cómo atraer a electores muy distintos ideológicamente», constató.
Rama Caamaño ha dedicado las últimas semanas a evaluar a todos los asesores en Presidencia de Gobierno, en torno a doscientas personas, según desveló El Confidencial. Gracias a su trabajo se han realizado fichajes y también ha habido algunos despidos con el objetivo de dar un cambio «estructural» en la sala de máquinas del Ejecutivo con motivo de la salida de Óscar López y Antonio Hernando al Ministerio de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales.
El joven politólogo venía en 2019 de ganar el premio al mejor artículo de Revista Política en lengua extranjera con un texto sobre el voto populista en el continente europeo desde la Gran Recesión de hace casi un siglo. «En los últimos años, he escrito mucho sobre comportamiento electoral. Concretamente, sobre los factores explicativos del voto a partidos populistas en los países europeos, tanto del Este como del Oeste», hizo hincapié.
«¿Cómo ves la política nacional? ¿Habrá que repetir elecciones?», le inquirió el periodista en un momento en el que ya se vislumbraba que habría que volver a las urnas -finalmente fue el 9 de noviembre de aquel 2019-. «La política nacional ha cambiado de forma notable desde 2011, y parece que ya no hay vuelta atrás. Ahora los partidos son más débiles, porque concentran menos porcentaje de votos, los gobiernos menos estables, porque dependen de otras fuerzas políticas para aprobar sus propuestas y, lo más preocupante, existen mayores diferencias entre los partidos, que están más polarizados y se preocupan cada vez más en dividir al electorado», explicó Rama Caamaño antes de confesar que no veía «descabellado» la repetición de comicios.
«La política es muy coyuntural»
En un momento en el que el bipartidismo tenía dificultades para sacar pecho ante la pujanza de nuevas formaciones como Vox, Ciudadanos o Podemos, el ahora ‘número dos’ en el Gabinete de Moncloa dudaba del «recorrido» político del PP con sus exiguos 66 escaños. «La política es muy coyuntural, y los politólogos no hacemos predicciones a futuro», advirtió.
Y a la pregunta de si el «conflicto» catalán tenía solución, su respuesta fue afirmativa, «pero tiene que ser política», dijo a renglón seguido. «Hay que buscar un punto de encuentro en un clima tremendamente crispado», constató tras la llegada de Sánchez a la Moncloa.
«Hace falta que los partidos que creen en la unidad de España tengan un discurso sólido, que no esté simplemente basado en el respeto a la Constitución y el dejar a los jueces que se ocupen de cuestiones políticas, tales como las identidades nacionales o el encaje territorial. Creo que hacen falta políticos con altura y que sepan estar a la altura de uno de los mayores conflictos que vive hoy España», sentenció Rama Caamaño.