3,14 calienta, que sales
Tu amigo Monedero ha demostrado que le gusta babosear a chicas que tienen casi cuarenta años menos que él
Pablo Iglesias. | Europa Press
3,14 calienta, que sales. Ya sabemos que a tu amigo Monedero le gusta más agarrarse a las carnes de las jovenzuelas que a su cartera para que no se la roben. Un sinónimo esta última con su apellido que llena en Venezuela y gasta en España. Y es que Monedero es un trabajador multitarea al que no le importa tener que trasladarse si se lo manda su jefe y amigo Maduro.
3,14 calienta, que sales. Tu amigo Monedero, por muy de Maduro que sea, ha demostrado dejar ese estado de conservación hace mucho tiempo, y ser un viejo verde-Vox (me refiero al color elegido por ese partido Trumpista para su logo, que no se me enfade nadie, por favor) al que le gusta babosear a chicas que tienen casi cuarenta años menos que él. 62 años contemplan a este señor que se acerca peligrosamente a la edad de jubilación, pero que le gusta pensar y actuar como un adolescente salido. Su ideario y su comportamiento así lo atestiguan. Un «revolucionario» al que papá Estado le siga pagando las fiestas para después poder seguir despertándose a la hora de la siesta, y por tanto seguir durmiendo a la sopa boba. Y entre sueño y sueño comunista, seguir sobando, pero no por estar dormido, sino con las manos, los cuerpos gráciles de las chavalas. Moldear el sueño de un cuerpo femenino y joven que siente la pesadilla de un hombre sin escrúpulos.
3,14 calienta, que sales. No sé quién ha aprendido más del otro. Eso que ambos sois profesores universitarios y lo de la docencia debería ser algo que tuvieseis «dominado». Tanto como a alguna de esas estudiantes a las que violentar en un baño, como el caso de Fernanda, la pareja del youtuber «Un hombre blanco hetero», o las que han denunciado a tu amigo de gafas microscópicas. Que es un hombre corto de miras lo ha demostrado al tener que acercarse tanto a las mujeres para poder verlas. Y es que si las palpaba era para cerciorarse de que las tenía cerca.
3,14 calienta, que sales. Dicen que no hay dos sin tres. Y si tus amiguitos, los listos, los que utilizan gafas, no han podido evitar que su basura salga al exterior, usted que no parece el lápiz más afilado de ese estuche, es el momento de que ponga sus barbas a remojar. No le será suficiente con el corte de pelo que llevó a cabo hace algún tiempo. Parece que el que no se cortó la coleta emparejándose con la mujer más feminista que ha habido y que habrá, ha sido usted. Que ha querido seguir toreando en otras plazas es vox populi, y no lo digo yo, lo dicen mujeres que están o han estado en el entorno de Podemos. Otra vez «Vox» aparece para referirme a ustedes, a ver sí va a ser cierto aquello de que los polos opuestos se atraen. Lo que no me entra en la cabeza es que siendo ustedes hombres aliados a la causa feminista, a las mujeres que peor tratan son a las que presuntamente defienden sus mismos intereses. Hay filósofos que dicen que los hombres son sus contradicciones. Eso demostraría lo «muy hombres» que son entonces, lo que en su jerga significa los más «machirulos». Y es que quien mejor para definir algo que los que son expertos en la materia.
3,14 calienta, que sales. Sabes que los peones siempre caen antes que el rey y la reina. Usted que surgió para defenderles, pero desde un lugar muy lejano, casi irreal. Con el tiempo ese lugar se hizo materia palpable, como la que gusta tanto a su amigo, pero esta vez en forma de casoplón en Galapagar. Un lugar no muy fácil al que acceder para el proletariado. Pero todo jugador de ajedrez sabe que el jaque mate siempre está a la vuelta de la esquina, esperando a que el otro cometa el más mínimo error. Usted los fallos ya los cometió y son muy parecidos a los de sus «dos amigos». Hace tiempo que sabe que perdió la partida, pero le está salvando que el resultado todavía no es oficial. Lo malo es que parece que ahora sí, las “árbitras” van a firmar las actas.
