Los reyes de Suecia comparten su residencia con fantasmas
El palacio de Drottningholm, declarado por la Unesco patrimonio mundial de la humanidad, fue construido en el siglo XVII en la isla Lovon en Estocolmo. Es la residencia oficial del rey Carlos Gustavo y de la reina Silvia. Nacida en Alemania y educada en Brasil, Silvia es una soberana discreta y apreciada por sus obras de caridad y su sencillez. La princesa Cristina, hermana del rey, reitera las afirmaciones de la reina consorte.»Hay mucha energía en esta casa. Sería extraño si ésta no tuviera una apariencia», dijo Cristina en el documental. «Todas las viejas casas encierran historias. Han estado habitadas por gente durante siglos», añade.
La reina Silvia de Suecia asegura que el palacio real donde reside está encantado, según un documental que será difundido este jueves en la televisión estatal SVT. «Hay pequeños amigos, fantasmas. Todos son muy amables, pero a veces te sientes como si no estuvieras totalmente solo», dice la soberana, de 73 años. «Es muy emocionante. Pero no da miedo», añade.
El palacio de Drottningholm, declarado por la Unesco patrimonio mundial de la humanidad, fue construido en el siglo XVII en la isla Lovon en Estocolmo. Es la residencia oficial del rey Carlos Gustavo y de la reina Silvia. Nacida en Alemania y educada en Brasil, Silvia es una soberana discreta y apreciada por sus obras de caridad y su sencillez.
La princesa Cristina, hermana del rey, reitera las afirmaciones de la reina consorte.»Hay mucha energía en esta casa. Sería extraño si ésta no tuviera una apariencia», dijo Cristina en el documental. «Todas las viejas casas encierran historias. Han estado habitadas por gente durante siglos», añade.