Israel intenta poner fin a la sequía con un rezo multitudinario frente al Muro de las Lamentaciones
El ministro de Agricultura ha convocado a unas 2.000 personas en el Muro de las Lamentaciones para rezar para que la sequía llegue a su fin.
Después de cuatro años de sequía, el ministro de Agricultura de Israel, Uri Ariel, ha buscado una solución no convencional para poner fin a la escasez de agua: ha reunido a miles de fieles en el Muro de las Lamentaciones para orar para que esta situación llegue a su fin.
De esta forma, unas 2.000 personas se habrían concentrado frente al lugar más sagrado del judaísmo donde corearon una oración especial para terminar con la sequía que en los últimos años ha dañados sus regiones más fértiles, siendo los agricultores los más afectados. El rezo se celebró en presencia de los dos grandes rabinos de Israel: David Lau para los askenazíes (judíos originarios de Europa del Este) y Yitzhak Yosef, para los sefardíes (judíos de Oriente).
«Redujimos significativamente el costo del agua, estamos llevando a cabo muchos estudios sobre cómo ahorrar agua en diferentes cultivos, pero la oración ciertamente puede ayudar», apunta Ariel.
Sin embargo, algunos expertos se mostraron escépticos. El diario de mayor venta Yedioth Ahronoth publicó un comentario que decía que Ariel debería enfocarse en promover políticas para combatir el cambio climático, como limitar las emisiones de gases de efecto invernadero en la agricultura. «La oración no es algo malo, pero el ministro tiene la capacidad de influir en [asuntos] de una manera ligeramente más terrenal», señala.
Por su parte, el servicio meteorológico israelí asegura que la región viviría de nuevo un invierno seco y estima en un 65% los riesgos de precipitaciones en diciembre, enero y febrero, los meses supuestamente más lluviosos.
En marzo, el nivel del lago de Tiberíades, la principal reserva de agua dulce de Israel, alcanzó su nivel más bajo desde hace un siglo, según la Autoridad del Agua.
Israel evitó sin embargo los cortes de agua gracias a cinco centros de desalinización de agua de mar que fueron construidos a lo largo de la costa mediterránea.
Las tres cuartas partes de agua potable consumidas por los hogares israelíes provienen de estas desalinizadoras.