Inaugurado el puente más largo del mundo tras nueve años de polémica construcción

El presidente chino Xi Jinping ha inaugurado este martes el puente más largo del mundo, nueve años después de que comenzara su polémica construcción, en la que al menos 18 trabajadores que participaron en el proyecto perdieron la vida.

El puente, de 55 kilómetros, conecta las ciudades de Hong Kong y Macau con la ciudad de Zhuhai, en China continental. El coste de la construcción asciende a 20.000 millones de dólares y su inauguración había sido prevista en el año 2016, informa la BBC.

La megaconstrucción está diseñada para resistir terremotos y tifones y para su construcción se utilizaron más de 400.000 toneladas de acero, lo que equivale a construir 60 veces la Torre Eiffel. Al rededor de 30 kilómetros de su longitud total cruzan el mar del Delta del Río Perla. Para permitir el paso de barcos, una sección de 6,7 km ubicada en el centro se sumerge en un túnel submarino que se extiende entre dos islas artificiales.

El proyecto es parte de un plan para crear un área mayor en la bahía, que abarca las ciudades de Hong Kong, Macau y otras nueve urbes situadas en el sur de China. Actualmente, 68 millones de personas habitan en esta zona. El viaje desde la ciudad de Zhuhai hasta Hong Kong tenía una duración de cuatro horas, mientras que con el nuevo puente el tiempo del viaje se reduce a media hora.

Aquellas personas que quieran cruzar el puente deben obtener permisos especiales, que serán asignados por un sistema de cuotas, y todos los vehículos deberán pagar peajes. Además, no estará permitido el transporte público, por lo que se prestará un servicio de autobuses privado. La construcción tampoco cuenta con ningún enlace ferroviario. Las autoridades chinas estimaron inicialmente que alrededor de 9.200 vehículos cruzarán el puente cada día.

Control de bostezos 

Una de las medidas más innovadoras es la instalación de cámaras especiales que vigilarán a los conductores que muestren signos de cansancio. Cuando un conductor bostece hasta tres veces, las autoridades serán alertadas. Además, para prevenir posibles ataques terroristas, se instalarán 48 cámaras de vigilancia de alta definición a lo largo del puente, así como patrullas de la policía antiterrorista, informan desde el South China Morning Post.

Como la gente conduce por la izquierda en Hong Kong y Macao, se han construido canales de fusión especiales para que los conductores cambien de carril dependiendo de en qué lado de la carretera se encuentren.

Una construcción muy polémica

El proyecto ha recibido un aluvión de críticas, llegando a ser apodado el «puente de la muerte«, ya que al menos nueve trabajadores en el lado de Hong Kong y otros nueve del lado continental han muerto durante la construcción. También resultaron heridos cientos de trabajadores, según funcionario chinos.

A las muertes se suman las quejas por el impacto medioambiental. Varios grupos ecologistas han denunciado que el proyecto puede haber causado graves daños a la vida marina de la zona, incluido el delfín blanco chino, especie extremadamente rara. El número de delfines observados en las aguas de Hong Kong ha disminuido de 148 a 47 en los últimos 10 años. Actualmente se encuentran ausentes en las aguas cercanas al puente, según un comunicado de la sucursal del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) de Hong Kong.

«El proyecto ha causado daños irreversibles al mar«, ha advertido Samantha Lee, Directora Asistente de Conservación del Océano en el WWF. «Me preocupa que el número nunca vuelva a aumentar», ha añadido.

Por otro lado, la cifra astronómica a la que asciende el coste de la construcción (20.000 millones de dólares), ha sido duramente criticada. Aunque los funcionarios chinos dicen que generará hasta 10.000 millones de yuanes para la economía, un legislador de Hong Kong puso en duda esa cifra. Según la BBC china, el puente sólo ganará alrededor de 86 millones en peajes por año, de los cuales un tercio serán destinados a los costes de mantenimiento.