El fantástico creador de superhéroes Alan Moore se despide del mundo del cómic
El padre de ‘Watchmen’ y ‘V de Vendetta’ ha anunciado que el próximo número de ‘La Liga de los Hombres Extraordinarios’ será su último cómic
Alan Moore, uno de los escritores de ficción más importantes del panorama anglosajón, ha anunciado su retirada del mundo del cómic. El creador ha asegurado que el último número de La Liga de los Hombres Extraordinarios será su último cómic, su contribución final a una forma de arte que transformó por completo, a veces para su disgusto.
Con Miracleman, personaje creado en la década de los 80, deconstruyó el mito del superhéroe. Inspiró a tantos imitadores a oscurecer a los héroes que antes eran amigables, que Moore se ha disculpado más de una vez por ello. Su estilo literario oscila entre Stephen King y John le Carré y su influencia se puede sentir en todas partes: en la literatura, en el audiovisual, en la política…
Escritores tan diversos como China Miéville y Ta-Nehisi Coates lo han citado como inspiración. La demócrata Alexandria Ocasio-Cortez utilizó una cita de Watchmen para responder a las críticas de su propio partido: “No estoy encerrada aquí contigo. Tú estás encerrado aquí conmigo”. La gran esperanza de HBO después de Juego de Tronos es la adaptación del libro más popular de Moore, Watchmen.
Incluso ha inspirado al grupo de activistas Anonymous, que usan máscaras de Guy Fawkes como tributo a V, el héroe anarquista de Moore e ilustrado por David Lloyd.
Y aunque se dedica al mundo del cómic, Moore rara vez los dibuja. En su lugar, escribe guiones de cientos de páginas, describiendo al milímetro cada detalle. Guiones en ocasiones presentados en ediciones de lujo.
Antes de Moore, la idea de que los cómics podían ser literatura era ridícula. Planteó preguntas inquietantes a los superhéroes, que aparecían siempre en historias que se reescribían retroactivamente y parecían no tener fin.
Moore, como salvador de los superhéroes es irónico de muchas maneras. Por un lado, su trabajo sugiere que son, en el mejor de los casos, irresponsables y, en el peor, posiblemente fascistas. Por otro lado, el proceso de trabajar con DC Comics, que publicó su trabajo durante sus dos períodos de mayor producción, a mediados de los 80 y finales de los 90, lo amargó tanto que a menudo ha repudiado su propio trabajo.
Quizá, su mayor desencanto con la industria del cómic sea con DC. Tanto a Moore como a Gibbons se les prometió que los derechos de Watchmen y V de Vendetta se les devolverían cuando dejasen de imprimirse, pero la compañía nunca lo hizo.
Gibbons ya predijo lo que sucedería en este acuerdo en 1986. «Lo que sería horrible, y DC podría legalmente hacer, es que Rorschach se cruzara con Batman o algo así, pero tengo suficiente fe en ellos y no creo que hagan eso», dijo a Neil Gaiman en una entrevista pública conservada por Comics Journal.