El actor de espectáculos de Broadway Nick Cordero ha muerto por complicaciones derivadas del coronavirus tras pasar más de tres meses hospitalizado en Los Ángeles, según ha informado su mujer en redes sociales.
En contexto: Nick Cordero llevaba tres meses hospitalizado y la semana pasada su mujer detalló en una entrevista que había necesitado un transplante doble de pulmón para tratar la enfermedad, que incluso le provocó un coma y por la que tuvieron que amputarle una pierna. El caso de este actor ha sido muy seguido en Estados Unidos, ya que la familia asegura que no tenía problemas médicos previos.
«Mi querido esposo ha fallecido esta mañana. Su familia lo rodeó de amor, cantando y rezando mientras salía gentilmente de esta tierra», ha escrito su mujer, Amanda Kloots, en redes sociales apenas días después de anunciar que el actor había dado negativo a la prueba de la COVID-19[contexto id=»460724″] pero con graves secuelas.
El tratamiento de Cordero, de 41 años y nominado al premio Tony, ha sido muy seguido en Estados Unidos ya que era una figura reconocida en el circuito de Broadway y no tenía problemas médicos previos, según afirma su familia.
En la entrevista en la que habló de los detalles de la enfermedad, su mujer dijo que fue tan fuerte que los médicos llegaron a temer por su vida en cuatro ocasiones anteriores.
Cordero nació en Canadá y llegó a Nueva York para trabajar como actor de teatro. En 2014 fue nominado al premio Tony -los Óscar del teatro- por su papel en Bullets Over Broadway, por el que ganó también un Theatre World Award y un Outer Critics Circle Award.
Rock of Ages, Waitress y A Bronx Tale: The Musical son otros de los espectáculos en los que participó. En la pequeña pantalla actuó en producciones como Law & Order: Special Victims Unit y Blue Bloods.
Cordero era padre de un hijo de un año, llamado Elvis «Era amigo de todos, le encantaba escuchar, ayudar y especialmente hablar. Fue un actor y músico increíble. Te amaré por siempre», ha publicado su esposa.