Tim Burton se ha propuesto devolvernos a las pantallas a la tan añorada familia Addams. Esta serie estadounidense que combinaba la comedia, la fantasía y en su esencia el terror, se emitió en la cadena de televisión ABC desde 1964 hasta 1966.
Por el momento es solo una idea, sin embargo, sabemos que la nueva versión de la gótica familia pretende centrarse en los personajes de la hija de los Addams, Homero, y la inigualable Morticia Addams, madre de la familia. Tratarán de cómo sería para estos personajes el mundo actual.
Con motivo de esta noticia, vamos a centrarnos en el personaje que se ha convertido en patrimonio de la comedia de terror y cuyo siniestro estilo ha conseguido inspirar al mundo de la moda sin importar la época, hablamos de Morticia Addams.
La eterna elegancia de Morticia Addams
En los años 30, la tétrica Morticia nació como un personaje de cómic, sin embargo, no será hasta los 60 cuando la protagonista conseguirá colarse en los hogares a través de los televisores para robar el corazón de innumerables espectadores.
Su interminable y lacia melena negra azabache, combinada con largos, ceñidos y góticos vestidos. O sus uñas infinitas, labios rojos color sangre, pómulos exageradamente marcados sobre una pálida y tersa piel, sumado a sus ojos rasgados que parecían atravesar las pantallas con su mirada. Son algunas de las características que consiguieron convertirse en la impronta de la que es conocida como el corazón de la familia Addams.
Su vampírica imagen fue la culpable de la creación del fetiche del cuero y las mujeres góticas. En los años 60, cuando todas las mujeres lucían vestidos desajustados y coloridos, a lo ‘parchís’, la imagen de la matriarca de la familia Addams parecía toda una provocación, con sus ceñidos trajes que no parecían tener fin y que tampoco le permitían moverse, prácticamente era incapaz dar dos pasos de apenas un par de centímetros. Las cintas de seda que rodeaban sus brazos y se dejaban caer, son lo que ahora vemos adaptado como flecos.
Peculiar pero cautivadora
Morticia combinaba su singular estilo con una encantadora personalidad, lo que hacía su personaje mucho más atractivo y complejo.
Tenía una especial devoción por la botánica, pudimos verla en varias ocasiones con una constancia y tenacidad incomparable cortando impolutas rosas rojas. Las rosas no las quería para nada en concreto, Morticia iba a por los tallos espinosos, que los utilizaba para decorar la fúnebre mansión Addams, cuanto más punzantes mejor.
Otra de las singularidades de esta oscura estrella, es la ‘popular’ Cleopatra, su apego por la jardinería no terminaba en las rosas. Cleopatra era su planta carnívora que se alimentaba ni más ni menos que de ojos humanos.
En definitiva, la moda tiene mucho que agradecer a Morticia Addams. La herencia de su estilo que actualmente ya normalizamos, como los flecos o sus uñas interminables, que ahora se conocen como las de ‘La Rosalía’, ya las veían en los 60 y se describían en los cómics de los 30, el cuero ceñido o los labios rojos son un básico para las mujeres de hoy. Así con cada una de las características de la psicótica Morticia que vinieron para quedarse. Y es que la moda es como las crisis, siempre vuelve.