Sophia Loren confiesa que Cary Grant nunca le propuso matrimonio y lamenta no haberse casado de blanco
La actriz italiana Sophia Loren ha enterrado uno de los grandes mitos del cine al aclarar que Cary Grant, su compañero de reparto en Orgullo y Pasión (1957), nunca le propuso matrimonio durante la grabación de esa película.
Por qué te lo contamos: el idilio que Loren y Grant mantuvieron durante el rodaje de esta película (en la que también participaron figuras como Frank Sinatra) fue uno de los más comentados de su época. Negando la propuesta de matrimonio en una entrevista concedida a la revista británica Radio Times, la veterana intérprete, de 86 años, ha despejado uno de los rumores que llevaban décadas circulando por Hollywood.
Lloren, que regresa este noviembre al cine con una película de Netflix, había dado en ocasiones anteriores detalles sobre la relación, en la que ella apenas tenía 23 años, 30 menos que él. «Cary Grant era un hombre muy guapo y un actor maravilloso, pero no me propuso matrimonio», ha aclarado en la citada entrevista la leyenda italiana.
Según ha explicado, ella era entonces demasiado joven como para tener ideas claras acerca del amor y de las relaciones. Ya en su libro de memorias, publicado en 2014, la actriz, que estaba a punto de contraer matrimonio con el productor de cine Carlo Ponti, explica cómo Grant, casado con su tercera esposa, no dejó de perseguirla hasta convertirla en su amante.
Sophia Loren escogería a Ponti —22 años mayor que ella—, y esa sería una decisión que definiría, según ella, su vida y su carrera. Sin embargo, siguió manteniendo con Grant una relación de amistad, en la que continuaron charlando telefónicamente y escribiéndose cartas.
En la citada entrevista, Loren ha hecho balance de sus logros personales. «Es muy difícil poder decir que no tienes ningún arrepentimiento. En la vida siempre atraviesas muchas experiencias, pero siempre he intentado vivir sin arrepentimientos», ha indicado.
«He logrado alcanzar una vida tranquila. Tengo todo lo que siempre he querido: una familia maravillosa, con niños y nietos estupendos y lo único que lamento un poco es que nunca me casé de blanco. Ese era el sueño e mi vida, y aún lo llevo dentro», ha admitido.