El legendario pianista de jazz Chick Corea murió el martes a causa de un cáncer a los 79 años. «Es con gran tristeza que anunciamos que el 9 de febrero, Chick Corea falleció a los 79 años a causa de una forma rara de cáncer que sólo fue descubierto recientemente», reza una publicación de su Facebook, que subraya que el músico era un «marido, padre y abuelo querido, y un gran mentor y amigo de muchos». «Aunque sería el primero en decir que su música transmitía mucho más que las palabras, tenía este mensaje para todos los que lo querían: ‘Quiero dar las gracias a todos los que me han ayudado a mantener el fuego de la música en mi viaje'».
Por qué te lo contamos: Corea fue una destacada figura en el desarrollo del jazz de la posguerra, y pasó tiempo tocando con el grupo de música eléctrica de Miles Davis, por lo que forma parte de varios álbums de jazz que han pasado a la historia, como In a Silent Way (1969) y Bitches Brew (1970) .
Corea quiso en su último mensaje al público pedir que todo aquel que sienta curiosidad por tocar música, escribir o actuar, se lance a hacerlo: «No sólo porque el mundo necesita más artistas, sino porque además es muy divertido», afirmó Corea, que dijo además que ha sido «una bendición y un honor» aprender de sus amigos músicos.
El músico, nacido en Chelsea (Massachusetts) el 12 de junio de 1941, fue el cuarto artista con más nominaciones de los premios Grammy de la historia, al acumular un total de 65, de los que finalmente se llevó 23. Además, era conocido por el extenso número de géneros musicales en los que participaba dentro del jazz, desde el vanguardista hasta el bebop, la fusión y la música de cámara.
Corea era considerado frecuentemente, junto con Herbie Hancock y Keith Jarrett, como uno de los pianistas de jazz más importantes desde los años 60 en adelante. Tras publicar álbums más tradicionales en los primeros años de su carrera, entre los que destaca Now He Sings, Now He Sobs (1968), lanzó su grupo de música eléctrica Return to Forever con un disco del mismo nombre, que ahora es descrito como un punto de inflexión para el jazz de fusión, que se convirtió en la corriente principal en los años 70. Tras disolverse Return to Forever, siguió grabando y participando en giras tanto en el grupo Elektric como Akoustic, ambos muy populares tanto en festivales internacionales como en salas de jazz estadounidenses.