Ferrer-Dalmau abrirá un taller dirigido a personas autistas: "El arte es de todos y para todos"
El proyecto ya cuenta con instalaciones donde desarrollarse y ahora busca apoyo de instituciones para la contratación del profesorado
El proyecto ya cuenta con instalaciones donde desarrollarse y ahora busca apoyo de instituciones para la contratación del profesorado
El artista Augusto Ferrer-Dalmau, popularmente conocido como El pintor de batallas, está desarrollando la idea de un taller sin ánimo de lucro dirigido a personas con autismo o de otro tipo de condición que les presenten dificultades para desenvolverse en la sociedad. El origen del proyecto surgió en una ocasión en que algunos de estos chicos y sus familiares enseñaron sus dibujos al pintor y este apreció el talento que escondían.
«Varios padres de estos chicos me enseñaron los dibujos de sus hijos, que me parecieron magníficos, y me animaron a crear un taller escuela para ellos. Tienen unas grandes cualidades como artistas y pienso que bien orientados pueden abrirse un camino en el mundo del arte», explica Ferrer-Dalmau. El pintor cuenta que visitó a los chicos en sus actividades y que le «emocionó» la «ilusión y el espíritu» con que desempeñaban su labor.
La iniciativa está apadrinada por la Fundación Arte e Historia Ferrer Dalmau, la Fundación ALAPAR y se desarrollará en colaboración con la Universidad Nebrija. La idea es crear un taller donde un grupo de jóvenes con esta clase de dificultades pueda dar rienda suelta a su capacidad artística, a la vez que se fomenta su promoción e integración en el mundo del arte.
Para ello, el taller se alejará ligeramente de los habituales temas de su padrino y optará por pintar las aventuras y expediciones de nuestra historia, en detrimento de las batallas. En las propuestas sobre los motivos a representar se contará con el consejo del escritor y académico Arturo Pérez-Reverte, así como de María José Solano (cofundadora de Zenda Libros) y Pablo Álvarez de Toledo (director del Departamento de Arte de la Universidad Nebrija).
La intención de los organizadores es que los participantes en el taller sean protagonistas al término del mismo de la edición de un libro donde se recojan sus trabajos, así como de una gran exposición pública. Su labor artística también se impulsará a través de los medios de comunicación, desde los que se tratará de mostrar la evolución de su trabajo.
El proyecto, además, ya cuenta con las instalaciones donde poder ponerse en marcha, las del Centro ALAPAR. En cuanto a la contratación del profesorado, el taller ha contactado con algunas instituciones públicas que pudieran y quisieran colaborar; en caso de no encontrar apoyo, acudirían a la vía privada. «Yo no sé si este proyecto será de interés para la Administración Pública, pero de lo que sí estoy seguro es que para los padres de estos chicos, para mí y para una parte de la población más sensible sí lo será», apostilla Ferrer-Dalmau.