Sierra Sonora finaliza un año histórico en La Rioja: 30 conciertos y más de 5.000 asistentes
El festival ha contado con cuatro ediciones por cada estación del año, añadiendo una más por su quinto aniversario
Rozalén, en Sierra Sonora 2024. | Sierra Sonora
El festival Sierra Sonora ha concluido su programación de este año, destacando por las actuaciones de Karmento, María de la Flor y Çantamarta en La Rioja. Este fin de semana pasado, alrededor de 300 personas se congregaron en este evento otoñal, disfrutando de una oferta que integra cultura, naturaleza, patrimonio y gastronomía. Con dieciocho ediciones a sus espaldas, el festival se ha consolidado como un evento clave en la agenda cultural española, atrayendo a un público cada vez más amplio y diverso.
A lo largo de 2024, Sierra Sonora se ha celebrado en cinco ocasiones distintas, adaptándose a las cuatro estaciones del año y añadiendo una edición especial por su quinto aniversario, que tuvo como protagonista a Rozalén. Este proyecto busca desestacionalizar sus eventos, con el objetivo de atraer visitantes a su localidad durante todo el año y fortalecer así el turismo y la economía local.
En las últimas ediciones, Sierra Sonora ha recibido a 5.000 visitantes, de los cuales el 50% provenían de fuera de La Rioja. Específicamente, el 20% de los asistentes llegaron desde el País Vasco y Navarra, mientras que un 15% viajaron desde Madrid y otro 15% desde otras comunidades autónomas. Este flujo de visitantes no solo enriquece culturalmente al festival, sino que también impulsa significativamente la economía local.
El festival ha generado empleo para más de 100 personas en diversas áreas, desde la logística y la seguridad hasta el diseño y la comunicación. Este equipo ha trabajado arduamente para ofrecer una experiencia memorable a todos los asistentes, contribuyendo al mismo tiempo al desarrollo de empresas de servicios turísticos y auxiliares en la región.
Los organizadores de Sierra Sonora ya están planificando las fechas y las novedades para las ediciones de 2025, esperando continuar con el éxito alcanzado en años anteriores y seguir promoviendo la diversidad cultural y económica de La Rioja. Este festival no solo es un evento para disfrutar de buena música y entornos naturales, sino también una plataforma para el desarrollo sostenible y continuo de la comunidad local.
