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Vicent Cervera (Bombai): «No hay tiempo para explicar lo catastrófico que fue el covid»

El guitarrista del grupo valenciano habla de su último trabajo y de una década de trayectoria

Poco a poco, canción a canción, el grupo valenciano Bombai ha construido una carrera de diez años. Para conmemorarlo, sacan su primer disco físico, Diez años contigo, que es además un libro, lleno de memorias y de color. Su guitarrista, Vicent Cervera, cuenta cómo tres amigos del colegio, del barrio de Monteolivete, consiguieron abrirse paso en la industria musical, los golpes de los que se han recuperado en este tiempo, la ilusión de trabajar con los grandes artistas que admiraron de pequeños, como Bebe o Coti, y el mensaje que quieren transmitir sobre todo: la felicidad del verano. Y pide algo, fuera del oficio: no se olviden los pueblos de Valencia que siguen sufriendo la tragedia de la dana de octubre.

PREGUNTA.- Vicent Cervera, guitarrista de Bombai, forma el grupo junto con Javi Fernández y Ramón García. No han podido venir, primero, porque la mesa tampoco es tan grande y, luego, porque también tienen otros compromisos. Estáis publicando un disco físico, el primer disco físico que editáis, con el que además celebráis diez años de carrera, Diez años contigo.

RESPUESTA.- Celebramos diez años en la música, que no es poco.

P.- Parecería fácil. Somos tres amigos, nos juntamos para armar un conjunto, como se decía antiguamente, y aquí estamos. Pero no es tan fácil, ¿verdad?

R.- Como todo, es una apuesta arriesgada, porque somos conscientes de que de toda la gente que intenta ganarse la vida con la música, entrar en la industria musical muy poco porcentaje lo consigue. Muy poca gente consigue ser un artista consolidado que llega a millones de personas. Nosotros lo conseguimos gracias a mucho esfuerzo, a mucho compromiso, y tenemos que estar agradecidos. Dar las gracias y sobre todo ser ejemplo para todo el que venga detrás y tenga también sueños e inquietudes y pueda algún día dedicarse a esto.

P.- ¿Cómo surgió el grupo? ¿Cómo fue esa conexión Mediterráneo-Pacífico?

R.- Nosotros teníamos muy claro que lo que queríamos hacer era un producto. Queríamos hacer un grupo de música, somos tres amigos que nos conocemos de toda la vida, del colegio, que nos hemos visto crecer y cada uno de nosotros experimentábamos con la música de manera distinta. Yo he tenido grupos de música con gente por ahí, donde Ramón y Javi no estaban. Javi era Javi Fernández como artista en solitario. Ramón le pasaba lo mismo que a mí, tenía otros grupetes. Pero llegó un momento que dijimos los tres chavales que hemos salido del colegio, de Monteolivete, los tres gitanos del barrio que nos ha inquietado la música, ¿por qué no nos juntamos y hacemos algo guapo? Tenemos la posibilidad, tenemos lo que hay que tener para hacerlo, tenemos la capacidad, vamos a juntarnos. Y decidimos hacer un producto con una identidad muy clara, que es lo que tú has hablado: mediterráneo, tropical, playero, festivo, popero, festivalero, hawaiano. Un estilo muy característico.

“Decidimos hacer un producto con una identidad muy clara: mediterráneo, tropical, playero, festivo”

P.- La playa como denominador común.

R.- El ukelele, que lo utilizamos como instrumento, como bandera, es una identidad. Tú, cuando nos ves, sabes que somos Bombai, o al menos que proyectamos algo, transmitimos algo. Hay muchos grupos de música que están muy bien, que hacen muchísimas canciones, pero no te dicen nada en cuanto a la imagen o a lo que te proyectan. Nosotros sí queríamos trabajar mucho eso, proyectar una imagen, tener una identidad muy clara.

P.- Y en estos años de meterse en la industria y intentar abrirse paso, ¿qué ha sido lo más duro?

R.- Lo más duro siempre decimos que es alejarnos de nuestra familia, es viajar mucho, estar mucho tiempo fuera de casa.

P.- ¿Eso no es lo normal en un grupo pop, donde suele gustar precisamente rodar?

R.- Claro, a la gente lo que le gusta es estar por ahí. Pero es verdad que esto de la música nos pilló ya maduros, ya con familias, con hijos incluso. De pillarnos más jóvenes habríamos liado unas de no te cuento, pero ahora, el pasar tantos días fuera de casa con las familias, quedarnos en Valencia es complicado. Al mismo tiempo, pasar tiempo fuera de casa también te da aire, conoces muchas cosas. Es una dualidad. Lo peor es estar fuera de casa, pero lo mejor también es estar fuera de casa.

P.- Además, a mitad de carrera os pilló la pandemia, que tampoco creo que haya sido fácil, porque para la industria fue un desastre en muchos sentidos.

R.- Yo creo que no tenemos tiempo en este podcast para hablar de lo que fue el covid para una empresa como nosotros. Al final, somos tres socios. Es una empresa donde hay más trabajadores, una gestora, empleados, que de repente ve parada su actividad al cien por cien. Se nos cayeron los contratos de ayuntamientos, conciertos, salas que teníamos cerradas, toda la gira de un año y más, porque no sabíamos lo que iba a pasar, se nos tumbó. Entonces, de venir de una escalada, una trayectoria ascendente, exponencialmente también, porque íbamos cada vez a más, 2018 nos fue muy bien, en 2019 ya estábamos generando buen dinero, estábamos viviendo bien, y de repente en 2020, boom, se nos cayó el alma al suelo. Fue muy catastrófico, pero gracias a Dios nos hemos podido recomponer.

Hemos salido del paso. Contar lo que hemos tenido que hacer es largo. Molaría contarlo algún día. Los tres, cada uno con su experiencia personal, poniendo en conjunto cómo logramos salir del paso. Ten en cuenta que nosotros somos independientes, no pertenecemos a una multinacional, somos dueños de lo nuestro. No había tampoco una compañía que nos soportase, que nos diese un dinero. Estábamos en en la calle; bueno, en en la calle no, estábamos en casa, pero sin ingresos. Nos hemos podido recuperar y muy bien. Bueno, y no sé si me vas a preguntar, después del covid nos ha tocado en Valencia lo que nos ha tocado.

Vicent Cervera (Bombai). | TO

P.- La dana.

R.- Si nosotros quisimos hacer el grupo para mandar mensajes positivos y esperanzadores, nos tenemos que aplicar el cuento y tenemos que ponerlo en valor.

“Yo que he caminado por las calles, he visto todo aquello, no puedo describir lo que fue la dana”

P.- ¿Habéis salido a ayudar?

R.- Sí, y tenemos amigos, familia cercana afectada. No se nos ha muerto nadie cercano, pero sí amigos han perdido sus trabajos, sus negocios, sus casas, coches, vehículos, enseres personales. Ayudamos en todo lo que podemos, sí. Esto fue la noche del 29 y ya se está viendo por redes sociales lo que estaba pasando.

Yo vivo en una zona en la que ni llovió. Hacía mal tiempo y tal, pero no llovió. Nos saltaron las alarmas de los móviles, pi pi pi, todo pitando, y entonces me metí a ver qué pasaba y vi la que se estaba liando. Cogí la moto y me fui a aquella zona, a ver lo que pasaba, para ver si se podía ayudar en algo. Ya estábamos viendo por redes sociales y plataformas y por las noticias que había algo gordo. Lo que me encontré fue que no solo yo era el loco que iba por allí, sino que había miles de personas también a ver si podían aportar algo y ayudar.

Lo que nos encontramos al día siguiente, cuando se hizo de día fue un desastre. Todo lo que se ha visto es poco comparado con lo que es vivirlo allí. Yo que he caminado por las calles, he visto todo aquello, no puedo describir lo que es. El covid, para mí, se ha quedado en nada. Mira que nos encerraron meses en casa, perdimos dinero, mucha gente falleció, pero lo que ha vivido toda la gente de seis o siete pueblos de la zona sur de Valencia…

P.- Es que además, cuando pasa una noticia así, que acapara la atención, el foco mediático, luego pasa el pico y la gente se olvida. Y no solamente los medios, sino los que tendrían que hacer algo para solucionar las cosas.

R.- No me voy a meter en tema política porque no toca, pero es que es que es muy duro lo que ha pasado. Y os agradecemos mucho a los medios que os seguís acordando, porque hay que seguir haciendo llamamiento, porque oye, allí están pasando cosas aún. Vas a los pueblos y todas las plantas bajas de todos los pueblos afectados están destruidas, los coches de todos los pueblos se han ido a la basura. Hay que ayudar, económicamente, o con los recursos que se tengan.

P.- Hablabas antes de unos chicos de barrio. No sé si tenéis formación musical o empezasteis de manera autodidacta.

R.- Tenemos formación musical, pero no académica.

P.- ¿Qué consejo darías a la gente que quisiera montar un grupo de música?

R.- El consejo que podemos dar, que tampoco somos nadie para dar consejos –sí, hemos llegado, lo hemos conseguido–, pero si tenemos que decir algo, es que sea la música o sea cualquier otra disciplina, lo importante es llevar al límite esa inquietud que tú tienes y no decaer. Tú tienes un sueño, tú tienes una inquietud por algo, llámese música, que es tocar instrumentos o componer canciones, cantar o intentar producir, como si es el fútbol, si te gusta montar cualquier tipo de historia, que lo intentes y que no decaiga. Al principio vas a ser malo porque todos hemos sido malos. Nosotros éramos malísimos cuando empezamos, pero bueno, malos, malos, de hecho seguimos siendo malos al día de hoy.

P.- ¡Fantástica promoción!

R.- Pero lo que tenemos, somos. Tenemos valor, compromiso, ilusión. Cuando cuando vino una piedra en el camino, no volvimos hacia atrás, sino que la saltamos. Y eso es lo que tenemos que decir: tirar p’alante.

P.- Aquí estuvo Fran Román, que fue guitarrista de Los Piratas. Tú también eres guitarrista, digamos no la cara más visible, aunque los tres estéis en el mismo plano empresarial. ¿Cómo se lleva eso de ser el segundo?

R.- Tengo mucho que hablar de eso. Es verdad que yo no soy la cara visible del grupo, porque la sociedad asume que el cantante de un grupo es el líder, la cara visible, el frontman. Ok, me parece muy bien. De hecho en nuestro grupo pasa: Javi es el que pone la voz a Bombai y es la cara visible. Además es un chico que en apariencia es mucho más guapo que yo, tiene mucha más presencia que yo, tiene mucho más carisma que yo y eso lo aprovechamos. Uno no llega a ser cantante y frontman por casualidad. Tienes que tener carisma y seguramente en Los Piratas, Iván Ferreiro tendría también más carisma, y los que quizá no estamos en ese primer plano, nos quedamos en segundo plano, pues oye, quizá es nuestro lugar, hay que asumir que es nuestro lugar. Hoy por casualidades estoy aquí representando a Bombai. Estoy muy orgulloso y aporto lo que puedo.

P.- Hay segundos legendarios. Keith Richards, por ejemplo.

R.- Brian May.

P.- Antes decías que vuestro grupo es un producto y teníais muy claro qué era lo que queríais. Habéis ido lanzando singles, piezas. Ahora lo que se hace es más ir sacando pequeños proyectos, dándolos a conocer antes que el concepto de trabajo completo. No sé si eso no hay más remedio que acatarlo así, si os gustaría que fuera de otra forma, hacer un trabajo completo, diez canciones de principio a fin y esto es lo que tenemos para decir.

R.- Nosotros creamos el grupo, hicimos unas cuantas canciones, unas cuantas maquetillas con el poco dinero que teníamos, porque nosotros hemos sido pobres como las ratas, y con una canción, una sola canción, nos lanzamos a la industria musical. Solo si es contigo fue el single junto a Bebe, que fue número uno, disco de oro. Hoy en día tiene dos discos de oro, disco de platino. Fue una canción con la que nosotros nos lanzamos al mercado.

No sabíamos cómo funcionaba el mercado musical, como funcionaba la industria. Entonces, nos dejamos guiar por una oficina de representación, que es la que también nos hizo estar donde donde estamos, y nos fiamos de la estrategia que quería llevar la oficina con nosotros, que era hacer canciones single tras single. No sé si hace diez años era lo que se llevaba, era lo que era tendencia o no, pero a nosotros nos ha funcionado. Sacábamos una canción y era radiada, y entraba en las mejores radios de este país, y entraba en los tops de las listas. Pasaba un año, sacábamos otro single y el siguiente single nos daba para pasar otro año más. Es a los tres años o cuatro años cuando cuando sacamos un disco con varias canciones. Tenemos un pequeño EP con tres singles de radio más unas canciones que teníamos ahí grabadas. Fue un EP de cinco canciones. Luego salió un disco que produjimos nosotros mismos, porque nos apetecía. Vamos a hacer un disco, sin productor, nos encerramos en un estudio y lo hacemos nosotros, y ahora sacamos con el décimo aniversario este disco que es recopilatorio de las mejores canciones que hemos hecho.

“A todos nos ha gustado en esta vida tener una canción del verano, que cantas, que te alegra”

P.- Y un libro, lleno de color. Con eso pasa también con la fotografía, que hay un revival de lo analógico, a lo físico, porque digital es efímero.

R.- El recopilatorio de canciones está muy bien, pero al final las canciones las has escuchado ya. El que nos conoce las ha escuchado, son canciones que ya existen, menos una, un bonus track inédito, pero lo importante es el libro. En él contamos nuestra historia desde 2014-2015 hasta 2024-2025. Lo hemos hecho nosotros también, es todo hecho por nosotros. Lo he diseñado yo, pero bajo la supervisión de mis compañeros. Me he encontrado con carpetas con fotos, con vídeos, con historias, hasta el billete de AVE de la primera vez que vinimos aquí a Madrid, cuando grabamos con Bebe. Es como un libro-diario, porque por cada año hacemos un resumen.

P.- Un scrapbook.

R.- Sí, sí, es justo eso: mucho recorte, mucha foto, mucho texto y mucho color, porque es lo que somos nosotros. Tenía que ser llamativo el colorido. He tomado como referencias libros que han hecho otros artistas. Tengo uno de El Canto del Loco que me compré cuando era joven, que también contaba su trayectoria; unos amiguetes, Los Pignoise, también nos enviaron, el de su 20 aniversario. Nos hemos ido un poco con ese formato, lo hemos hecho con nuestro criterio y a mí me emocionó muchísimo hacerlo. Ha sido como vivir otra vez esos diez años, pero a través del ordenador.

P.- El concepto canción del verano, que en vuestra música encaja bastante bien.

R.- Es lo que te he dicho antes: hacer una canción que justo era para funcionar en el verano, y a nosotros es lo que nos dio los primeros años de vida.

P.- Claro, pero está muy denostado el concepto.

R.- A mí que me sigan dando canción del verano, vamos, que a mí me funcionó muy bien. Para el negocio fue muy bien. A todos nos ha gustado en esta vida tener una canción que cantas, que te alegras.

Vicent Cervera (Bombai). | TO

P.- ¿Cuál tu canción del verano favorita?

R.- Las del primer campamento de verano al que fui: Antes que ver el sol, de Coti con El Canto del Loco, y La madre de José, de El Canto del Loco. Ese verano La madre de José sonó muchísimo y Antes que ver el sol también. Coti es alguien con el que hemos colaborado ahora. Fue el primer verano en que yo besé a una chica, en el campamento… Tengo un buen recuerdo.

“No entiendo yo que ahora de repente vayamos a hacer reguetón urbano, a meternos en otro estilo porque sea tendencia”

P.- Siempre se asocia a esas cosas, ¿no?

R.- Es el poder de la música.

P.- ¿Y cómo es trabajar con artistas que has admirado?

R.- Eso es una barbaridad. No sé cómo expresar lo especial que es que yo haya visto debajo de un escenario a David Otero con El Canto del Loco tocar la guitarra, con barba, con el pelo largo, y yo decir «tío, yo quiero ser como ese, ese tío mola». Ese tío con la guitarra, que se baje, que tiene aquí a 150 tías que quieren conocerlo, eso tiene que ser lo mejor. Y resulta que pasan los años y yo consigo dedicarme a lo que se dedicaba él, a lo que yo siempre he querido, y lo he podido compartir con él. Hacer una canción, estar en un estudio, cantar en directo, que sea mi compañero, tener su número de teléfono, hablar por WhatsApp… Es súper especial. Tengo que estar muy agradecido, y es algo que yo me llevo a la tumba con orgullo. Y como siempre digo, ser ejemplo: que otros lo puedan conseguir para que cualquier persona pueda sentir esa emoción.

P.- ¿Cómo os veis proyectados en el futuro?

R.- Yo lo veo que ojalá pasen diez años más. O sea, yo quiero estar en la industria musical diez años más o veinte años más. A mí me encantaría. También veo que la industria ha cambiado, que lleva un ritmo que yo, que estoy más cerca de los 40 que de los veintipico quizá ya no estoy en la misma tendencia que lo que pide la industria musical, lo que piden las redes sociales, en cuanto a TikToks, tendencias, vídeos, bailecitos…

Hay una dicotomía ahí, entre seguir haciendo lo que venimos haciendo –nosotros somos old school en la música, somos adultos– y las nuevas generaciones. No sé si nuestro estilo de música o lo que nosotros queremos hacer tiene mucho recorrido, pero lo vamos a intentar, porque es lo que somos. No entiendo yo que ahora de repente vayamos a hacer reguetón urbano, a meternos en otro estilo porque sea tendencia o porque la industria lo pida. La industria me tiene un poco intrigado con qué va a pasar.

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