Un épico Alcaraz supera a un imponente Sinner para avanzar a las semifinales del US Open
El murciano bregó para remontar en la madrugada neoyorquina un partido que cualquier otra persona habría dado por perdido en el tercer set
El tenista español Carlos Alcaraz. | Robert Deutsch (Reuters)
Carlos Alcaraz está hecho de otra pasta. La conclusión después de su imponente victoria ante el italiano Jannik Sinner por (3-6, 7-6,7-6,5-7, 3-6) es que el murciano, de tan solo 19 años de edad, ha aprendido a sobreponerse a las situaciones menos afortunadas dentro de la pista, cuando nada sale y solo queda bregar. A pesar de ir por debajo en gran parte del partido, a base de esfuerzo y empuje el tenista ha firmado el mejor partido de la temporada.
Aunque el primer set había corrido de su parte, Sinner (de 21 años) es de los talentos más esperanzadores de la nueva generación de tenistas y no iba a ceder tan fácilmente ante el que está llamado a ser uno de sus grandes rivales generacionales en la raqueta, a quien ya se impuso en Wimbledon. Ambos han firmado el partido más largo del US Open, con cinco horas y 15 minutos.
Alcaraz no se ha venido abajo ante las dificultades -no pocas- que su rival ha ido superponiendo a lo largo de las más cinco horas del partido. Cualquier otro deportista habría dado por perdido todo en el tercer set, perdiendo el saque, viéndose superado en todos los embates planteados. La gran ventaja es que Alcaraz no es como el resto.
El murciano supo remontar el partido tras perder dos sets seguidos en el tie-break. Especialmente doloroso fue el segundo tras caer por 7-0 en los puntos de desempate a causa del imponente juego del italiano y sus repetidas rupturas en el saque.
El cuarto set tampoco ha arrancado con alegrías para la afición española. Con un 5-4 que parecía dictar para sentencia el encuentro y tras más de cuatro horas de puro tenis, el murciano ha dado la vuelta a las expectativas para encontrarle las cosquillas a su rival con todo cuesta arriba. Con un punto de partido y el veloz saque de Sinner (de hasta 176 kilómetros por hora en algunos puntos del partido) sobre su cabeza, a Alcaraz solo le quedaba abonarse a la épica para una nueva noche de ensueño y poner del revés el partido llevándose la manga.
Alcaraz, a por el número 1
El pupilo de Juan Carlos Ferrero ha vuelto a demostrar que gobierna en la ‘hora golfa’ en la ciudad de Nueva York y mantiene intacto su sueño de acabar el torneo como nuevo número uno del mundo, ahora en poder virtualmente del ya eliminado Rafa Nadal. Llegar a la final, si no es ante Casper Ruud, se lo garantizaría, y si es ante el noruego, ganarla.
«Honestamente, no sé cómo lo he hecho. El nivel que jugué, el nivel de tenis del partido. Fue increíble. Jannik es un gran jugador», ha explicado un emocionado Alcaraz en medio de la ovación en la mayor pista de tenis del mundo (23.800 asientos).
En la ronda de cuatro le espera el que fuera el verdugo de Rafa Nadal en octavos, el estadounidense Tiafoe, que tratará de aprovechar el agotamiento de su rival para avanzar a la final en casa.
