Rodrygo y Vinicius mantienen invicto al Real Madrid en Champions (2-1)
Los blancos vencen al conjunto ucraniano con una eléctrica primera parte, aunque merecieron más por las ocasiones generadas
El jugador del Real Madrid, Vinicius Jr. | Reuters
El Real Madrid venció (2-1) al Shakhtar este miércoles en el Santiago Bernabéu, gracias a una primera parte eléctrica en la que Rodrygo Goes y Vinicius Júnior convirtieron los dos goles madridistas, y se desquitó tras su ‘pinchazo’ liguero para encarrilar su pase a los octavos de final de la Liga de Campeones.
Tras esta victoria, que completa el pleno blanco continental, los merengues se ponen líderes del Grupo F de la ‘Champions’ con nueve puntos y solo un gol en contra. Un triunfo que pudo ser mucho más holgado, pero Benzema no tuvo su mejor día de cara a gol, y Trubin, e incluso el palo, salvó a los ucranianos de una goleada.
En la segunda mitad, la intensidad disminuyó, aunque las ocasiones siguieron cayendo del lado madridista, que finalmente se quedó con un premio algo corto para el juego mostrado.
El Real Madrid, al que ya se le noto más carácter que hace solo tres días frente a Osasuna, tuvo el primer acercamiento en el minuto dos. Solo ocho minutos más tarde, Fede Valverde empaló un balón desde la esquina derecha del área grande para probar por primera vez a Trubin. Un inicio dominador, aunque sin grandes ocasiones, para los blancos, que ya encorsetaban al conjunto ucraniano en su campo.
La insistencia, aunque solo fuera en posesión, encontró el camino en el minuto 13, cuando Rodrygo Goes logró batir al meta del equipo ucraniano con un disparo desde media distancia que se coló por el palo derecho del portero del Shakhtar. El gol dio tranquilidad a un Real Madrid que empezó mejor y con más tino.
El Real Madrid siguió apretando, con una presión que ahogaba la salida del Shakhtar, que seguía sin probar a Lunin. Vinicius, protagonista por la izquierda, hizo levantarse al Bernabéu con una buena jugada individual dentro del área, y después asistió a Benzema, que sirvió de tacón para Valverde, pero el uruguayo estrelló en el defensor su disparo.
El hambre y el empeño que costó ver en el ‘pinchazo’ ante Osasuna volvían a aparecer, algo que ya es una actitud básica de los blancos en su competición fetiche. La superioridad continuó y Benzema pudo ampliar el marcador, pero su disparo lo sacó bien Turbin, que nada pudo hacer en el disparo cruzado de Vinicius dentro del área tras un buen pase de Rodrygo. La conexión brasileña ponía 2-0 a los blancos, que encarrilaban el triunfo en los primeros 28 minutos del encuentro.
A partir de ahí, aluvión madridista, con una oportunidad para Vinicius, casi tocando área pequeña, que sacó Bondar sobre la línea de gol; y con un remate de volea de Benzema tras un rechace que se fue lamiendo el poste derecho de la portería. En el 35′, francés y brasileño conectaron con una pared explosiva por la izquierda que el brasileño no pudo concretar ante Turbin, convertido ya en el héroe visitante.
El Real Madrid perdonó en exceso y el Shakhtar acortó distancias justo antes del descanso con un golazo de Zubkov, que ajustó el esférico a la esquina inferior izquierda de la portería de Lunin, tras una precisa asistencia de Mykhaylichenko. Una desconexión de los de Ancelotti daba vida a los ucranianos.
Le sentó bien el descanso al Real Madrid, que desde la reanudación encerró al Shakhtar, con ocasiones desde el córner y un disparo lejano de Valverde. Sin embargo, la más clara sería para los ucranianos, cuando Mudryk galopó por la izquierda aprovechando un balón a la espalda, pero Mendy se adelantó y entre él y Lunin evitaron el empate. Los blancos respondieron con mucha posesión y un peligroso acercamiento de Rodrygo, cuyo disparo sacó Trubin con muchos reflejos.
El conjunto madridista perdió intensidad con el paso de los minutos, Ancelotti lo notó y dio entrada a Camavinga en el minuto 75. El Shakhtar se había estirado algo más, y el francés hizo que el equipo ganara en músculo y contundencia. Benzema pudo ampliar la renta, incluso Asensio, que entró en la recta final, vio como el palo evitaba su gol en el descuento. El Real Madrid, que pudo irse con una goleada, remató hasta en 34 ocasiones, 13 de ellas dentro de los tres palos.
