THE OBJECTIVE

Prohibido dudar de Karim

«El Balón de Oro, acostumbrado a remar contra corriente desde el inicio de su carrera, decidió olvidarse de lamentos y apretar los dientes»

Prohibido dudar de Karim

Karim Benzema. | Europa Press

Al igual que dudar es humano, podríamos decir que poner en tela de juicio a Karim Benzema es una costumbre. Le lleva sucediendo desde que aterrizó en Madrid. No me libro ni yo, que soy quien escribe estas líneas. La excepción es Florentino Pérez, que, en 2009, cuando se enteró de que el Manchester United bebía los vientos por la emergente estrella del Olympique de Lyon, se subió en su avión privado para cerrar personalmente la operación que le convertiría en futbolista del Real Madrid. Florentino se plantó en su casa, en la humilde barriada de Bron. Karim, que ni siquiera se encontraba en su domicilio, pensó que su padre y su agente le estaban vacilando… ¡hasta que lo vio cara a cara en el salón familiar! Unos meses después, y tras darle su palabra de que vestiría de blanco, Benzema era presentado en el Estadio Santiago Bernabéu. El resto es historia.

Historia de la buena

Es un término que a veces se utiliza a la ligera. El de «hacer historia», digo, pero en este caso está totalmente justificado. Y es que, con sus tres goles al Real Valladolid, Karim Benzema ha pulverizado varios registros. Por un lado, se ha convertido en el primer jugador madridista en 121 años que logra superar los 20 goles durante 11 temporadas. Hasta ahora, el récord lo ostentaban dos leyendas del calado de Alfredo di Stefano y Raúl Gonzalez Blanco con 10. Por el otro, el francés ha logrado escalar al podio de los elegidos. Aquel en el que destacan los goleadores más rápidos en hacer un hat-trick. Benzema lo hizo frente a los castellanos en tan solo seis minutos y 30 segundos. Aquellos que discurren entre el 29 y el 36 de la primera parte. Es, además, lo que los ingleses (inventores del término) consideran como «el verdadero hat-trick«: tres tantos de manera consecutiva sin goles de tus compañeros de equipo entre medias.

El primero es un cabezazo a dos palmos del suelo tras tensa y perfecta asistencia con el exterior de Vinicius. El segundo es una conducción individual con amago para sentar a un defensa (Joaquín) que termina colocando ajustada al palo largo. El tercero, una media chilena en escorzo después de un balón de Rodrygo que inicialmente le pilló mal parado. La historia del Madrid es tan rica y longeva que esta maravillosa rareza de Karim ‘sólo’ le sirve para situarse en tercer escalón del pedestal. Por delante, y en primera posición, Pahiño, que en los años 50 le hizo un triplete al Nastic de Tarragona en cuatro minutos. En segundo lugar, Fernando Hierro, quien en 1992 le hizo tres al Espanyol en seis minutos. Historia de la buena.

Benzema, al rescate

Karim lleva una dura temporada. Quienes estamos cerca del día a día del Real Madrid sabemos que lo ha pasado mal en la vertiente física pero también en la psicológica. Desde que se lesionara el 6 de septiembre frente al Celtic de Glasgow ha dejado de entrar en hasta 14 convocatorias por diferentes problemas físicos, entre dolencias derivadas de la lesión primigenia y «fatigas musculares». En el aspecto anímico, Benzema ha tenido que asimilar el desplante del seleccionar francés Deschamps tras tener que abandonar precipitadamente la convocatoria de la selección gala en el Mundial de Qatar.

El Balón de oro, acostumbrado a remar contra corriente desde el inició de su carrera, decidió olvidarse de lamentos y apretar los dientes con varias decisiones importantes. Para empezar, pasó página del combinado blue mediante un comunicado en el que se despedía para siempre del equipo de su país sólo un día después de que se disputara la final del evento mundialista. Para continuar se puso en manos de los fisios, preparadores y readaptadores del conjunto blanco con el objetivo de recuperar su mejor versión física en el tramo final de temporada. Y el plan, de momento, parece estar funcionando: 16 de sus 22 goles han llegado después del Mundial, sus dos actuaciones más épicas del curso (Liverpool y Valladolid) han sido en el último mes y medio, y su renuncia a los compromisos internacionales le han concedido un tiempo de recuperación antes impensable.

Llega el momento clave de la temporada y el Madrid se juega los dos títulos (Copa y la Champions) en los que sigue vivo con su delantero estrella en estado de gracia. Mañana toca remontar en Barcelona y Benzema acude al rescate. Recuerden; cuando todos los focos le apuntan: prohibido dudar de Karim.

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D