La FIFA da un jaque casi mate a Rubiales y complica la candidatura del Mundial 2030
La intención del presidente de la RFEF es comunicar a la asamblea que admite su error y acepta una inhabilitación
Luis Rubiales. | Zuma Press
La Federación Internacional de Fútbol (FIFA) ha abierto un procedimiento disciplinario contra el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, lo que pone en grave riesgo la candidatura del Mundial 2030. La posición de Moncloa, que trabaja en la sombra un pacto con Rubiales, se mantiene en instar a la RFEF a adoptar una resolución que les evite tener que juzgar el caso del beso de Rubiales a Jenny Hermoso y su tocada de genitales en el palco de la final de Sidney en compañía de la reina Letizia y la infanta Sofia, pero la FIFA ha decidido tomar cartas en el asunto.
Esta decisión del máximo organismo del fútbol mundial se convierte en un jaque casi mate, tanto para el presidente federativo, como para la candidatura española a organizar la Copa del Mundo 2030, en el caso de que Rubiales se mantenga en el cargo.
Tal y como informó THE OBJECTIVE, el Ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, y el entonces secretario de Estado José Manuel Franco otorgaron a la RFEF de Rubiales una subvención de 7,5 millones de euros, que ya ha cobrado, de los que más de tres se aprobaron para distribuir entre las territoriales, algo inédito cuando nueve meses después de esa concesión pública todavía no se conocen ni las bases para organizar el Mundial.
El pacto de la «vergüenza»
«Inaceptable», «disculpas insuficientes», «queremos que sea la RFEF la que tome medidas y, si no, entrará el CSD», son frases que llegan desde el lado socialista del Gobierno y que contrastan con la contundente petición de dimisión de la vicepresidenta Yolanda Díaz.
La explicación de esa huida hacia delante de Pedro Sánchez, Miquel Iceta y el actual presidente del CSD, Victor Francos, vendría marcada por la maniobra desvelada por Onda Cero para que fuera la propia Federación la que impusiera una sanción de inhabilitación temporal de unos dos meses a Luis Rubiales, que evitaría la capacidad sancionadora del CSD por el principio jurídico non bis in idem, que prohíbe la doble sanción de un mismo hecho.
Según fuentes consultadas por THE OBJECTIVE, la intención de Rubiales y su núcleo duro sería la de comunicar primero a los presidentes territoriales y luego a la asamblea que el mandatario admite su error y acepta una inhabilitación temporal que le permitiría regresar a su puesto. Sin embargo, el hecho de que haya trascendido la maniobra ha generado un tsunami en Moncloa.
La asamblea se desmorona
La otra gran preocupación de Luis Rubiales reside en conseguir el quorum de la asamblea de este viernes. Según los estatutos federativos, el mínimo de asistentes para que se pueda celebrar sería de mayoría absoluta en primera convocatoria (71) y un tercio en segunda, por lo que al menos se necesitan 47 asistentes.
La gran labor de Rubiales está fijada en mantener su guardia pretoriana de presidentes territoriales, que además controlan sus clubes no profesionales, los árbitros y el fútbol sala, ya que solo con ellos ya cumpliría el quorum de segunda convocatoria. Su primera gran decepción ha llegado con el mensaje de no asistencia de la Federación Vasca, mientras que otras como la de Castilla y León se lo piensan y las demás callan, en un silencio aterrador para Rubiales, al que nadie ha dado su apoyo público.
Los clubes profesionales no asistirán y Medina Cantalejo ya se ha preocupado de que sus colegiados estén libres para cumplir su ‘obligación’ de apoyar a quien les abona la nómina con el dinero de La Liga. Por ejemplo, Martínez Munuera pitará el lunes el partido Getafe–Alavés. Además, ha cancelado un briefing semanal que coincidía con la asamblea. El cerco a Rubiales se estrecha, pero que nadie olvide que su apodo cuando llevaba el número 17 en su camiseta de futbolista era «pundonor».
