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José Luis Abajo, presidente de la Federación Española de Esgrima: «En París la vamos a liar»

El primer esgrimista español en lograr una medalla en los JJOO apuesta por 24 preseas para la delegación española

José Luis Abajo, presidente de la Federación Española de Esgrima: «En París la vamos a liar»

José Luis Abajo 'Pirri'. | pirriesgrima.es

José Luis Abajo, más conocido como Pirri, se convirtió en una pieza de la historia del deporte español en las olimpiadas de Pekín, en 2008, al convertirse en el primer esgrimista en obtener una medalla para nuestro país con un bien merecido bronce. Ahora, más de una década después, continúa aportando al deporte de su vida mediante su labor como presidente de la Real Federación Española de Esgrima. THE OBJECTIVE ha contactado con él para charlar sobre su trayectoria y sobre los nuevos talentos que se están preparando en la federación bajo su tutela.

PREGUNTA.- Acaban de disputar el campeonato de España y ahora ya están los Juegos… ¿nervioso?

RESPUESTA.- Quizá la palabra no es nervioso, la palabra es que se respira tensión en el ambiente. Porque además creemos que tenemos muchas posibilidades de obtener una medalla en esta cita olímpica. Pero antes tenemos el campeonato de Europa en Basilea y donde esperamos poder obtener también algún metal.

P.- Dos representantes en la cita olímpica. Esto no pasaba desde 2008. ¿Ves opciones de medalla?

R.- Realmente hay muchas opciones de medalla. Por un lado está Carlos Llavador, que ya tiene experiencia olímpica porque ya estuvo en Tokio. Lleva cuatro años entre los 16 mejores. Creemos que tiene serias opciones, de hecho ya ha logrado medallas esta temporada… Y luego está Lucía, de las mejores del mundo dentro del top cinco, y en las últimas competiciones ha logrado medallas. Plata, sin ir más lejos, en la última Copa del Mundo. Y además queda el campeonato de Europa, a donde llega en una forma espectacular. Luego sabemos que los Juegos son muy complicados, es un día y es diferente, pero tienen serias opciones los dos.

P.- ¿Cómo me definiría a Carlos Llavador?

R.- Pues Carlos Llavador lo definiría que lo tiene bajo control, reflexivo. Y en los combates lo controla todo, tanto sus rivales como el entorno. Tiene serias opciones porque maneja muy bien sus emociones. Si está inspirado, con la distancia y el ritmo adecuados, es un tirador muy peligroso. 

«Lucía es puro fuego y no le da miedo nada»

P.- ¿Y a Lucía Martín-Portugués?

R.- Lucía es puro fuego, una tiradora de mucho carácter, que arrolla a sus rivales y que basa gran parte de su esgrima en su iniciativa. Es muy valiente, no le da miedo nada, y es una tiradora que, estando en el momento de arrancar, con actitud positiva, es muy, muy peligrosa. 

P.- ¿Dónde está la clave que puede desequilibrar un combate?

R.- La clave son esos momentos especiales que hay que identificar dentro del asalto. Esto puede ser con el 2-2, con el 7-7, 13-13 y, por supuesto, con el 14-14. Pero hay momentos durante el combate en el que tu sabes que lo que tu hagas, una decisión que tomes, puede cambiarlo entero. No puedes gestionarlo a la ligera, ni dejarlos pasar. Porque puedes cambiar el combate, desequilibrar la balanza hacia un lado, y puede ser la llave para la victoria. Lo fundamental es que en ese momento clave pongas en marcha todo tu esgrima: tu experiencia, gestión emocional… Y tomes la decisión adecuada en el momento concreto. 

P.- En 2008 usted fue uno de los cinco que acudió con España y el primer medallista en esgrima en la historia.

R.- De los Juegos Olímpicos la verdad es que lo recuerdo absolutamente todo. Desde que llegamos por la mañana, que estábamos un poco renqueantes físicamente. El desfile de la ceremonia inaugural fue duro, estuvimos casi diez horas. Pero el desfile fue lo que me ayudó a competir mejor, más tranquilo, gastando las fuerzas justas en cada combate y una mentalidad súper concentrada para poner mis mejores herramientas. Pasó todo muy deprisa, y tuve la fortuna de ir pasando rondas hasta el momento final. Las semifinales las tuve muy cerca, pero perdí con el italiano Tallarol porque estaba súper inspirado. Posteriormente la medalla fue un asalto de infarto, un asalto que me cambió la vida. Afortunadamente, salió cara. 

«Actualmente no me paran por calle, la gente no sabe quién soy»

P.- ¿A usted la gente le para por la calle? ¿Saben quién es?

R.- Actualmente, no, claro no me paran por la calle y muchos no saben quien soy. Luego cuando les digo, entonces ¡Ah, si yo me acuerdo esa medalla que fue muy sonada porque era la esgrima y la primera vez!. Recuerdan cuando ya les dices. Recién llegado de los Juegos Olímpicos si me pasó en el aeropuerto, en el supermercado, que es verdad que la gente lo tenía muy reciente. Pero ahora sólo se acuerdan cuando les dices…

P.- Le he leído esta frase: «Para lograr la gloria hay que comer mucha mierda».

R.- Esa frase no es mía. Es de un gran entrenador y preparador físico, Fernando de la Peña que un día haciendo físico, y como estábamos un poco perezosos entre comillas, la usó con nosotros. Pero si, hay que perder, saber gestionar esa derrota y perseverar y levantarte cuando te caes para poder llegar a la gloria y la victoria.

P.- Y ahora, presidente de la Federación. ¿Se arrepiente?

R.- Estoy viviendo una etapa distinta en mi vida al frente de la Federación Española de Esgrima. Estoy encantado porque me gusta poder seguir ayudando a mi deporte desde otro lado, intentar corregir aquellas cosas que no me parecían bien, entender porque algunas de las cosas pasaban. Es un trabajo que no es fácil, tienes que estar pendiente de mucha gente. Pero con buenas intenciones y sentido común, podemos hacer las cosas bien. 

P.- ¿Dónde se sufre más, en el combate o en el despacho?

R.- El tipo de sufrimiento es diferente. Cuando estás en un combate tienes unos sentimientos (presión, tensión, adrenalina) que es lo que marca el combate. La gestión emocional. Se sufre también en el despacho cuando las cosas no salen bien, cuando factores externos lo dificultan. Cuando sale algo mal y además eres consciente de la existencia del error. También se sufre, pero son sentimientos diferentes 

«Una medalla olímpica sería la guinda»

P.- ¿Qué nota le pondría al esgrima español?

R.- A la esgrima española le daría un notable. Hemos tenido un ciclo bastante bueno. Hemos logrado eliminar la deuda que tenía la Federación. Hemos renovado algunos equipos y entrenadores. Creo que tenemos bastante visión de futuro con equipos que van a estar en élite en los Juegos de los Ángeles. Estamos consiguiendo medallas tanto en cadetes, junior, senior. Nos falta una medalla olímpica, que sería la guinda. 

P.- ¿Qué le falta todavía al esgrima español para poder llegar a la élite?

R.- Creo que ya formamos parte de la élite, entre los mejores del mundo en casi todas las armas y categorías. Es verdad que nos falta recoger algunas medallas más, tanto a nivel de campeonatos del mundo como en los Juegos. Pero tenemos muy buenos resultados en todas las armas. Hemos mejorado bastante. Tenemos que seguir promocionando nuestro deporte, tanto en las bases como con las federaciones, para que tengamos más éxitos futuros

P.- ¿Como se le convence a un niño para que practique esgrima en lugar de fútbol, baloncesto, etc.?

R.- A los niños hay que decirles que pueden pelearse con las espadas de manera controlada. Esto les encanta, son fan de nuestro deporte. El problema viene en los padres que no conocen nuestro deporte: no saben donde se puede practicar, cuánto tiempo necesita etc. Y esto frena un poco la práctica del niño, porque es el padre quien suele buscar el deporte. Pero el esgrima es un deporte súper completo que trabaja todos los elementos a tener en cuenta: tanto a nivel físico, personal, emocional etc. Es recomendable al cien por cien.

«Yo llegué al esgrima por mi padre, que era piloto de caza de combate»

P.- ¿Cómo llega Pirri al esgrima?

R.- Yo llegué a la esgrima por mi padre, que era piloto de caza de combate, y todos tenían que pasar por la esgrima. Además, cuando llegué a Madrid había un club cerca de donde yo vivía. Al final, practicaba muchos deportes a la vez, pero fue la esgrima la que me enganchó. Fue la esgrima la que me eligió a mí.

P.- Dígame la diferencia entre sable, espada y florete.

R.- La diferencia básica radica en los blancos válidos. La espada y el florete son armas de estocada, que hay que pinchar con la punta. La superficie válida de la espada es todo el cuerpo y del florete sólo es el tronco. La más diferente es el sable, que es un arma de filo y contra filo, y hay que dar con toda la hoja. Y aquí la superficie válida es de la cintura para arriba. Luego tienen reglas especiales y, tanto el sable como florete; quien ataca tiene la prioridad. Por el contrario, en la espada, el primero que toque al rival se lleva el punto.

P.- ¿Qué pálpito le da estos Juegos para el deporte español?

R.- Para estos Juegos, para todo el deporte español, es que la vamos a liar. Tenemos los mejores números de medallas y resultados de los últimos ciclos olímpicos, con lo cual esto te lleva a pensar que estos Juegos pueden ser los mejores de la historia y en los que se podría conseguir el mayor número de medallas. Ojalá que sea cierto. Lo que es seguro es que vamos a luchar para dejar a España en lo más alto.

«Siempre me gustaba competir de punta en blanco»

P.- ¿Se aventura a darme un posible número de medallas?

R.- Apuesto por 24 medallas. 

P.- Usted ha dicho también: el esgrima me ha enseñado estrategia, planificación y actitud… ¿cómo?

R.- La esgrima aplica de forma práctica toda la teoría. Es decir, tú tienes que elegir la estrategia con la que vas a salir a la pista: si vas a atacar, defender. En el mundo del deporte, entrar a ver qué pasa es la muerte. La planificación es lo que tienes que hacer diariamente para llegar a tu objetivo. No sólo tienes que entrenar para las competiciones, debes entrenar a un año, cuatro e incluso ocho años. Con lo cual, cuanto mejor planifiques, mucho mejor. Y la aptitud es lo que marca la diferencia. Y creo que es mi mejor herramienta. 

P.- Dígame una manía que tuviera cuando competía.

R.- No tenía muchas manías. Lo que sí me gustaba era ir blanco impoluto, recién lavado, comprado. Si algo se me estropeaba, lo cambiaba enseguida. Limpiaba todo antes de competir. No me gustaba que los guantes que estuvieran roto, despegados y sucios. Quería ir de punta en blanco. No me gusta el desorden. Lo mismo ahora en mi vida diaria.

P.- ¿Es muy sacrificada la vida de un esgrimista?

R.- La vida de esgrimista es igual de sacrificada que cualquier otro deporte. Es verdad que el esgrima, dado que necesitas un físico general y además específico, hay que entrenar mucho. Además necesitamos clase con el maestro, y además tienes que hacer combate con tus compañeros. Y eso requiere muchas horas y mucho tiempo para ser un esgrimista completo. 

P.- Dígame su epitafio.

R.- La esgrima es un gran deporte, es escuela de vida, y para mí ha supuesto una manera de hacer y de ser. El deporte es obligatorio, te hace ser mejor persona, y el deporte ha sido el culpable de lo que soy hoy. Siempre seré esgrimista y siempre seré deportista. 

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