Joan Laporta es, desde este domingo, nuevo presidente del Fútbol Club Barcelona al sumar 30.184 votos (el 54,28% del total) en las elecciones celebradas por la entidad azulgrana para elegir a su nueva junta directiva. De modo que se ha impuesto a Víctor Font –16.679 votos, el 29,99%– y a Toni Freixa –4.769 apoyos, el 8,58%–. Un total de 55.611 socios, el 50,42% de la masa social con derecho a voto, participaron en al elecciones a la presidencia del club azulgrana, pese a celebrarse en plena pandemia.
El dato: con la victoria de Laporta, que ya ocupó el trono entre 2003 y 2010, el Barcelona no añadirá un nuevo presidente a su historia y seguirán siendo 41 los mandatarios que lo habrán dirigido durante sus 121 años de vida.
En la historia del club, tan solo otros cuatro nombres lo presidieron en diferentes épocas no consecutivas: el fundador, Joan Gamper (1908-1909, 1910-1913, 1917-1919, 1921-1923 y 1924-1925), Gaspar Rosés (1916-1917, 1920-1924 y 1930-1931), Joan Coma (1925 como interino y 1931-1934) y Enrique Piñeyro (1940-1942 y 1942-1943). Pero Gamper, Rosés y Coma fueron escogidos mediante una rotación amistosa entre los directivos en una asamblea y, en el caso de Piñeyro, Marqués de la Mesa de Asta, fue impuesto por las autoridades franquistas.
«Somos una gran familia y nos une el sentimiento de pertenecer a este club y esto hará que vayamos todos juntos para afrontar los grandes. Lo debemos hacer con espíritu positivo y de victoria, huyendo de catastrofismos, para conseguir que regrese la alegría al barcelonismo», celebró anoche un Laporta visiblemente afónico. En la comparecencia estuvo acompañado por sus directivos y su equipo de campaña, que lucieron una mascarilla de color naranja con el número 14 de Johan Cruyff: «Nos inspira en todas las decisiones que debemos tomar, esta candidatura es desacomplejadamente cruyffista y barcelonista».
Por otro lado, el nuevo presidente recordó que «precisamente hacía 20 años que un chico que se llama Leo Messi debutó en el Infantil B» y verlo que «ha venido a votar con su hijo es una muestra de lo que» su candidatura ha venido diciendo durante «toda la campaña: que el mejor jugador del mundo quiere al Barça».