El Atlético de Madrid se apuntó el derbi (1-0) ante el Real Madrid este domingo en la jornada 35 de LaLiga Santander con un gol de Carrasco de penalti en el minuto 40, una alegría para el Wanda Metropolitano y para el cuadro rojiblanco en la tabla.
Los de Diego Pablo Simeone salieron con la necesidad y los de Carlo Ancelotti con un equipo lleno de cambios, con el reciente título de Liga por el que al final no hubo pasillo. El campeón, que tiene en la mente ya solo la final de Champions ante el Liverpool, fue de menos a más, y ambos perdonaron mucho ante Oblak y Lunin.
Con los tres puntos, además de un derbi que siempre gusta y más en una temporada de pocas alegrías, el Atlético suma 64, cuatro más que el Real Betis, que es quinto, para atar la máxima competición continental para el próximo curso, una obligación en el club. El equipo del ‘Cholo’ sacó petróleo de inicio en una fuerte presión.
Era la señal clara de noche importante para los rojiblancos, un intento fuerte por recuperar el balón y romper con espacios. Kondogbia y Koke mordieron y Correa tuvo la primera clara a los cuatro minutos, y Carrasco poco después tras un gran caracoleo. El belga convirtió el penalti que supuso el 1-0 en el minuto 40, por un pisotón de Vallejo a Cunha que vio el colegiado con ayuda del VAR.
Antes del descanso se animó el Madrid. El cuadro de Ancelotti asomó con Kroos y Jovic, con Oblak también protagonista para evitar el empate. El campeón se hizo con el balón en el inicio de la segunda parte y, con más participación de Kroos, encontró la manera de llegar al otro área. En el Atlético, el revulsivo había sido Griezmann y el francés terminó entrando en calor.
En medio de un flojo tramo de rendimiento, el ‘Principito’ generó mucho peligro, junto con Carrasco, pero ambos con la misma poca puntería. De manera consecutiva, uno rozó el palo y el otro la estampó, y tampoco Lunin permitió pasar el balón. Con los cambios, Ancelotti recuperó artífices del título como Modric y Vinicius.
El brasileño dejó su desborde y Valverde fusiló un par de veces a Oblak. Con la recta final y un Madrid abonado a la épica en especial en su avance por la Liga de Campeones, el Atlético supo sufrir para no perder tres puntos que afianzan la próxima ‘Champions’ con el buen sabor de boca de ganar un derbi en casa.
