El Barça de Flick, a examen
El técnico alemán parece estar encontrando las estrategias adecuadas de cara a una semana repleta de retos
El entrenador del FC Barcelona, Hansi Flick. | Xavi Bonilla (Zuma Press)
El entrenador alemán, Hansi Flick, ha caído de pie en el FC Barcelona. Ha empezado su andadura con muy buenos resultados y exhibiendo un nivel de juego muy convincente. Además, su comportamiento dentro y fuera del terreno de juego está siendo ejemplar. En las ruedas de prensa es claro y directo pero, a la vez, prudente y comedido. Y está exhibiendo una amabilidad con los periodistas y los aficionados poco habitual, demostrando que lleva muy bien la presión, que parece tenerlo todo bajo control y que está disfrutando del cargo. Lidera la clasificación de la liga con ocho victorias y una sola derrota, aventajando en 3 puntos al gran Real Madrid de Mbappé, que estaba llamado a arrasar.
La apuesta futbolística del alemán es muy ofensiva, promedia más de tres goles marcados por partido, con un fútbol valiente, rápido y vertical. Y lo está haciendo, prácticamente, con la misma plantilla con la que Xavi completó una mala temporada pasada. Lo que más ha sorprendido de Flick es su arriesgada propuesta defensiva que, hasta el momento, le está dando muy buenos resultados. Cuando pierde el balón, su Barça da dos pasos adelante en lugar de recular o replegarse hacia atrás.
Ha logrado que los delanteros y mediocampistas ejerzan una presión post-pérdida que ahoga la salida de balón de sus rivales y planta su línea defensiva muy cerca de la línea del centro del campo, compactando al equipo, cerrando los espacios y dejando, constantemente, en fuera de juego a los delanteros rivales. En el último partido contra el Alavés, la defensa azulgrana dejó en posición adelantada a sus atacantes rivales hasta en 11 ocasiones, una cifra récord esta temporada.
Por poner un ejemplo, es una cifra que iguala los que lleva el Real Madrid en todos sus partidos de Liga, mientras que el Barcelona ya lleva un total de 62 fueras de juego logrados ante sus oponentes. A los 11 del Alavés hay que sumar los logrados ante el Valencia (7), Athletic (5), Rayo Vallecano (4), Valladolid (4), Girona (7), Villarreal (7), Getafe (7) y Osasuna (10). Y este buen trabajo se ha traducido en goles anulados a sus rivales, como por ejemplo dos ante el Alavés y tres al Villarreal.
En la Champions, el equipo barcelonista dejó al Mónaco en seis ocasiones en fuera de juego y al Young Boys en siete. En los dos partidos, también les anularon goles a sus adversarios. Un dato muy revelador es que el más inmediato perseguidor en esta clasificación de fueras de juego, es el Brighton, que ha dejado a sus rivales en 31 ocasiones en fuera de juego, según datos de Stats Perform.
Para conseguir eso se necesitan defensas concentrados y valientes los 90 minutos, que sepan dar el paso adelante en el momento justo, y rápidos para corregir y correr los 40 metros que dejan a su espalda cuando les superan. Y, además, es preciso que esa presión sea coral de todo el equipo y muy bien coordinada para que los centrocampistas azulgranas tapen constantemente a los pasadores del equipo rival e impidan que estos lancen balones al espacio a sus delanteros. Al Barça le espera una semana grande, enfrentándose a Sevilla y Bayern de Múnich en casa, y al Real Madrid en el Santiago Bernabéu.
Y la gran incógnita es saber si Flick mantendrá su apuesta valiente y arriesgada ante rivales de tanta enjundia. No estaría de más que el alemán visionara la final de la Supercopa de la temporada pasada, en la que el Barça de Xavi cayó 1-4, jugando con esa misma defensa adelantada que Vinícius rompió por velocidad y dejando el partido sentenciado en la primera parte con un triplete. Flick debe valorar si mantiene esa propuesta de riesgo contra rivales que cuentan con jugadores más talentosos o bien ser un poco más prudente, con un planteamiento más conservador.
Recuerdo que Johan Cruyff solía jugar habitualmente con un 3-4-3 ultra ofensivo, que parecía un suicidio, pero que le funcionaba bien. En cambio, cuando iba al Bernabéu cambiaba a un planteamiento táctico más precavido, pero acababa perdiendo. De momento, el barcelonismo valora muy positivamente la apuesta táctica de Flick, pero como siempre los resultados acabarán dictando sentencia, y en este sentido el Barça llega al partido con el Real Madrid con ciertas «urgencias históricas», que decía Menotti, ya que ha perdido los últimos 4 clásicos de manera consecutiva. ¿Será Flick capaz de romper esta mala racha manteniendo su arriesgada propuesta habitual? La próxima semana saldremos de dudas.
