Vinicius y Bellingham rescatan al Real Madrid contra la Atalanta en un partido con peaje
Mbappé anotó el primer gol (2-3) del encuentro, pero se lesionó a la media hora de partido
Bellingham y Lucas Vázuqez celebran el tanto del inglés. | Reuters
Sangre, sudor y lágrimas es lo que le ha costado al equipo de Carlo Ancelotti ganar el partido. El Real Madrid se impone a la Atalanta (2-3) en la sexta jornada de la Champions League, lo que le sirve para coger aire en la clasificación. Los merengues empezaron bien con el gol de Mbappé, hasta que se lesionó, momento en el que los madridistas se vinieron abajo y los italianos conquistaron el empate con un gol de penalti de De Ketelaere al filo de descanso. Ya en la segunda parte, Vinicius y Bellingham, en dos jugadas seguidas, aumentaron la ventaja, pero Lookman acortó distancias aunque no pudieron culminar la remontada.
Ancelotti fue con tres cambios con respecto al último once en Montilivi. Lo más destacado, era el regreso, y como titular, de Vinicius. También reaparecieron Ceballos, en la sala de máquinas; Fran García, como lateral izquierdo; y repitió Tchouameni en el eje de la zaga, por delante de Asencio.
Por su parte, Gian Piero Gasperini fue con exactamente la misma alineación con la que venció al Milán la pasada jornada y les hizo líderes de la Serie A. Es decir, De Ketelaere y Lookman como la gran amenaza ofensiva de una Atalanta que no había perdido en Champions League esta temporada.
Mbappé tiene presa favorita
Un gran ambiente se vivió en el Gewiss Stadium, estadio del líder de la liga italiana, con un tifo increíble como preludio al intenso partido en Bérgamo. Mbappé no tardó en tener a primera, pero su disparo lo repelió Carnesecchi, a lo que Lookman respondió con un latigazo dentro del área que detuvo Courtois.
Esas dos jugadas fueron el preaviso al primer tanto del choque. Brahim jugó para Mbappé, que se zafó fácil de De Roon, lanzándose con su velocidad al área italiana, para finalizar la acción con un poderoso derechazo cruzado al palo largo, superando a Carnesecchi. Un gol marca de la casa del francés.
Tras este gol, el astro francés tuvo el segundo con un balón a la espalda de Hien, que le perdió en la carrera Mbappé, pero no estuvo fino en su mano a mano, topándose con Carnesecchi con su potente disparo. Esa fue la última jugada del francés antes de marcharse lesionado. En el minuto 34 el delantero del Real Madrid se echó al suelo por un problema muscular y tuvo que entrar Rodrygo al campo.
Esta lesión afectó al equipo, ya que Rüdiger tuvo que intervenir en varias ocasiones para frenar el empate de los italianos, hasta que no pudo pararles más y llegó el tanto de la Atalanta. Al filo del descanso, Tchouameni tocó a Kolasinac y el árbitro no dudo señalar los once metros donde De Ketelaere lanzó un penalti perfecto y potente a la misma escuadra para engañar a Courtois. Un duro varapalo para el Real Madrid tras el gran comienzo, el equipo se vino abajo con la lesión de Mbappé y el gol psicológico.
Vinicius y Bellingham al rescate
Sin cambios arrancó una segunda parte en la que los italianos fueron a por todas, aunque igual de rápido se acabaron sus aspiraciones. Cuando mejor estaba el Atalanta fue cuando recibió dos zarpazos del Real Madrid. Primero fue Vini, que aprovechó un regalo de su compatriota y rival Ederson para luego no fallar ante Carnesecchi, y seguidamente, Bellingham anotó el tercero tras un gran zurdazo dentro del área para coger ventaja en el marcador.
La Atalanta no dio su brazo a torcer y recortó distancia. Lucas Vázquez dejó espacios a Lookman dentro del área, que tras revolverse, sacó un derechazo al palo corto para superar a Courtois. Fue el toque de atención que le hizo falta a los de Ancelotti para volver a coger ventaja, pero ni Brahim ni Rodrygo pudieron culminar sus jugadas. Los madridistas se quedan decimooctavos con nueve puntos a falta de dos jornadas.
Con este resultado, el Real Madrid aún tiene mucho por jugarse en dos partidos de Champions League: Salzburgo (casa) y el Stade Brestois (fuera). También en La Liga tiene que jugar contra el Rayo Vallecano (fuera) y Sevilla (casa) en este mes de diciembre. Además, los de Ancelotti disputarán la final de la Intercontinental el 18 de diciembre.
