La Guardia Urbana de Barcelona ha desalojado una fiesta ilegal en un establecimiento sex shop del distrito del Eixample en la que participaban más de 60 personas que no respetaban las distancias de seguridad ni otras medidas de protección frente al coronavirus[contexto id=»460724″].
En contexto: ante el cierre del ocio nocturno por la crisis sanitaria provocada por la COVID-19, cada fin de semana se desalojan cientos de fiestas ilegales en las que se incumplen los protocolos y normativas para hacer frente al coronavirus. Solo en la ciudad de Madrid se detectaron este fin de semana 256 fiestas ilegales en domicilios. Esta reunión ilegal celebrada en Barcelona es solo un ejemplo de todas las que se celebran en España.
Según ha informado la Guardia Urbana, la fiesta, desalojada el pasado domingo y en la que también se consumían drogas, pudo ser advertida gracias a la colaboración de los vecinos. Además de desalojar el local, los agentes impusieron a los asistentes 61 denuncias por infracciones de las medidas de protección frente a la COVID-19, así como otras nueve denuncias administrativas al sex shop, y levantaron acta por tenencia y consumo de drogas.
Hace unas semanas fue la playa de la Barceloneta el punto de encuentro de un numeroso grupo de jóvenes que se reunieron sin respetar las medidas sanitarias contra el coronavirus. Se trata de escenas que, en muchos casos, circulan además a través de vídeos publicados en las redes sociales.
Por su parte, la Policía Municipal de Madrid ha desalojado, durante el pasado fin de semana, un total de 256 fiestas ilegales en domicilios que incumplían la normativa COVID. Una de las intervenciones más relevantes se produjo en el distrito de Moncloa-Aravaca el pasado sábado con el desalojo y precinto de un local en el que se sancionó a 196 personas. Se excedía el aforo del local y las personas que se encontraban en su interior fumaban y compartían cachimbas, además de encontrarse sin mascarillas y sin mantener las distancias de seguridad.