Dinamarca suspende la vacunación con AstraZeneca por posibles efectos secundarios de trombos

La Dirección General de Sanidad de Dinamarca (SST) ha anunciado este jueves la suspensión durante 14 días de la vacuna de AstraZeneca tras registrar «graves casos de trombos» en personas que la habían recibido.

Lo más importante: uno de los casos está relacionado con una muerte, explican en un comunicado las autoridades sanitarias, que resaltan que todavía no se puede concluir que haya una relación entre la vacuna y los trombos. La Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha iniciado una investigación al respecto, según la Dirección General de Sanidad danesa.

«Estamos en la campaña de vacunación más grande e importante en la historia de Dinamarca, necesitamos todas las vacunas que podamos conseguir. Por eso no es una decisión fácil suspender una. Pero debemos reaccionar con cuidado cuando hay evidencia de posibles efectos graves», ha afirmado el director de la SST, Søren Brostrøm.

Brostrøm ha resaltado que se trata de una pausa y que hay «buena documentación» de que la vacuna de AstraZeneca es «segura y efectiva», pero que las autoridades danesas se ven obligadas a reaccionar ante informaciones de posibles efectos «de Dinamarca y otros países europeos». La medida implica cambios en el plan de vacunación, que se retrasará en el peor de los casos cuatro semanas hasta el 15 de agosto, fecha en la que se espera que haya sido inmunizada toda la población que así lo desee.

La noticia llega poco después de que Portugal eliminara este miércoles las restricciones por edad para recibir dicha vacuna, sumándose así a otros países como Italia, Grecia, Alemania, Bélgica, Países Bajos, Suecia y Francia; que han permitido vacunar a personas mayores de 65 años con AstraZeneca. La Dirección General de Salud de Portugal (DGS) justifica el cambio por la «divulgación de datos conocidos en los últimos días, que indican que la vacuna de AstraZeneca es eficaz en personas con más de 65 años».

Con la última información disponible, expone la DGS portuguesa, se muestra que «la vacuna de AstraZeneca es eficaz en personas con 70 o más años, bien en la prevención de la COVID-19[contexto id=»460724″], bien en la reducción de hospitalizaciones por esta enfermedad, reforzando los datos iniciales de que esta es capaz de producir anticuerpos en el combate a la infección».

España es uno de los pocos países que aún mantiene las restricciones por edad para aplicar AstraZeneca, a pesar de que comunidades como Madrid, Andalucía y Cataluña ya han solicitado que la edad límite se amplíe de los 55 a los 65 años. La Comisión de Salud Pública decidirá este jueves si se eleva el umbral de la edad.

Aunque la idea era esperar a que concluyeran en abril los ensayos que iba a realizar la farmaceútica con personas más mayores, Carolina Darias, ministra de Sanidad, ha afirmado que la experiencia en otros países también es un factor para estudiar el cambio.