Donald Trump justifica su reacción tras Charlottesville

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha defendido con fuerza este martes su reacción tras los disturbios en Charlottesville en un discurso ante miles de seguidores en Phoenix, Arizona. El presidente también ha aprovechado el baño de masas para dedicar más de la mitad de su discurso de 78 minutos a criticar a la «gente enferma» de los medios y las élites.

«Los muy deshonestos medios… y me refiero a las realmente deshonestas personas en los medios y los medios falsos, se inventan historias. En muchos casos no tienen fuentes», ha declarado. «No informan sobre los hechos, tampoco quieren informar sobre que yo hablé duramente contra el odio, la intolerancia y la violencia y condené fuertemente a los neonazis, a los supremacistas y al Ku Klux Klan».

Trump ha sido blanco de duras críticas de demócratas y republicanos, así como de otros sectores, por no condenar enérgicamente la marcha de supremacistas blancos hace días en Charlottesville, que derivó en los disturbios violentos con antirracistas que se saldaron con una mujer muerta.

Por otra parte, Trump ha hecho un guiño al posible indulto de Joe Arpaio, el controvertido exalguacil del condado de Maricopa, Arizona, condenado por violar una sentencia federal al perseguir de manera implacable a inmigrantes latinos. Con todo, ha adelantado que el indulto no se producirá este martes: «No quiero causar ninguna controversia».

Arpaio, de 85 años y ferviente partidario de Trump, es considerado un héroe por quienes quieren poner fin a la llegada de indocumentados. No obstante, muchos activistas cuestionan el perdón que Trump evalúa concederle. «Indultar al alguacil Arpaio sería apoyar oficialmente el racismo y la supremacía blanca», ha argumentado Carlos García, representante de Puente Arizona, una organización que defiende el cumplimiento de los derechos humanos.