Duterte prohíbe de manera definitiva a los filipinos trabajar en Kuwait
La prohibición para los filipinos de ir a trabajar a Kuwait es definitiva, según ha afirmado este domingo el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, marcando una nueva agravación en la crisis provocada por el trato dado a los empleados extranjeros en ese país.
La prohibición para los filipinos de ir a trabajar a Kuwait es definitiva, según ha afirmado este domingo el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, agravando aún más en la crisis provocada por el trato dado a los empleados extranjeros en ese país.
Duterte prohibió provisionalmente en febrero a los filipinos ir a trabajar a Kuwait tras el asesinato de una empleada doméstica filipina, Joanne Demafelis, cuyo cadáver había sido descubierto en un congelador.
La crisis se agravó esta semana, cuando Kuwait ordenó la expulsión del embajador de Filipinas y llamó a consultas a su embajador en Manila.
Kuwait tomó estas medidas pese a las disculpas oficiales presentadas por un alto responsable filipino tras la difusión de videos que muestran cómo equipos de la embajada filipina organizaban la huida de empleados domésticos de las residencias de sus jefes kuwaitíes, sospechosos de maltratarlos.
Los dos países estaban negociando en ese momento, según Manila, un acuerdo para permitir el levantamiento de la prohibición provisional.
«La prohibición es permanente. No se reclutará más, en particular a empleados domésticos. No habrá más«, ha insistido Duterte frente a los periodistas en la ciudad meridional de Davao.