Samsung pide a todos los usuarios del Note 7 que apaguen sus dispositivos
Samsung ha suspendido la fabricación, venta y sustitución del modelo original, y ha pedido a los propietarios de ese modelo que apaguen sus aparatos no los utilizasen mientras se aclaraba por qué algunos terminales han entrado en combustión. Como la tarea no será fácil, puesto que deben retirar todos los modelos comercializados, incluyendo los que se comercializaron tras la revisión en una segunda tanda al detectarse los primeros problemas, ha pedido a las compañías de telecomunicaciones que le ayuden en la retirada de todas las unidades. De momento, la compañía no ha anunciado que tipo de compensación ofrecerá a cambio a los usuarios del Note 7. La muerte de este móvil llamado a liderar el mercado de las phablets, un híbrido entre un smartphone y una tableta, ha supuesto que el valor de Samsung se haya visto reducido en más de 15.000 millones de euros.
El sobrecalentamiento de las baterías que acaban convirtiendo los Samsung Note 7 en bengalas ha desatado una auténtica crisis en la compañía surcoreana. Aunque esté reparado o sea nuevo, el fabricante ha anunciado oficialmente que el terminal debe ser desterrado tras no poder hacer frente a los numerosos casos denunciados. El anuncio ha provocado que la compañía perdiera de golpe un 8% de su valor en Bolsa.
Samsung ha suspendido la fabricación, venta y sustitución del modelo original, y ha pedido a los propietarios de ese modelo que apaguen sus aparatos no los utilizasen mientras se aclaraba por qué algunos terminales han entrado en combustión. Como la tarea no será fácil, puesto que deben retirar todos los modelos comercializados, incluyendo los que se comercializaron tras la revisión en una segunda tanda al detectarse los primeros problemas, ha pedido a las compañías de telecomunicaciones que le ayuden en la retirada de todas las unidades. De momento, la compañía no ha anunciado que tipo de compensación ofrecerá a cambio a los usuarios del Note 7.
La muerte de este móvil llamado a liderar el mercado de las phablets, un híbrido entre un smartphone y una tableta, ha supuesto que el valor de Samsung se haya visto reducido en más de 15.000 millones de euros.