Airbus ha anunciado este jueves que registró una pérdida neta de 1.900 millones de euros en el primer semestre de 2020, reflejando la reducción a la mitad de sus entregas de aviones durante el periodo marcado por la crisis del coronavirus[contexto id=»460724″].
Los datos: Airbus registró en el primer semestre una facturación de 18.900 millones de euros, lo que representa una caída de 39% (-55% en el segundo trimestre) y una pérdida operacional de 1.600 millones de euros. El constructor de aviones europeo, que consumió 12.400 millones de euros de tesorería en los seis primeros meses del año, tiene «la ambición de no quemar más» reservas en el segundo semestre gracias a las medidas de adaptación puestas en marcha para hacer frente a la crisis, ha precisado en un comunicado.
«El impacto de la pandemia de la COVID-19 en nuestras finanzas es muy visible en el segundo trimestre, con las entregas de aviones comerciales divididas por dos con relación al año pasado», observa el presidente ejecutivo de Airbus, Guillaume Faury, citado en un comunicado. Airbus entregó 196 aviones en los seis primeros meses del año, es decir la mitad que en el primer semestre de 2019.
Las compañías aéreas noqueadas por el derrumbe del tráfico aéreo buscan atrasar la entrega o no están en condiciones de recibir los aviones debido al cierre de las fronteras. Las entregas son un indicador certero de la rentabilidad en la industria aeronáutica porque los clientes pagan la parte principal de la factura cuando toman posesión del avión.
