La pandemia cuesta casi 400 mil millones de euros al turismo mundial
Soe Zeya Tun | Reuters
El desplome del turismo internacional debido a la pandemia del coronavirus redujo en 388.000 millones de euros los ingresos del sector en el primer semestre, según ha estimado este martes la Organización Mundial del Turismo (OMT), una agencia de la ONU.
Los datos: el número de turistas internacionales cayó un 65% durante la primera mitad de 2020. Las pérdidas multiplican por cinco las registradas durante la crisis económica y financiera global de 2009. Se estima que el sector no comenzará a levantar cabeza hasta 2021.
La debacle es generalizada en todas las regiones, aunque la más golpeada es la de Asia y el Pacífico (72% menos de llegadas de turistas), seguida de Europa (-66%), África y Oriente Medio (-57%) y América (-55%). Aunque numerosos destinos empezaron a reabrir sus fronteras a mediados de mayo, «la mejora anticipada de las cifras de turistas internacionales durante la temporada alta del verano en el hemisferio norte no se materializó», lamenta la organización.
La OMT destaca también el fuerte impacto en el noreste asiático (-83%) o en la región mediterránea del sur de Europa (-72%), con importantes destinos turísticos como España e Italia que se convirtieron en importantes focos de la pandemia. Además, la demanda de viajes y –como causa y consecuencia– la confianza de los consumidores «seguirán siendo bajas» en los próximos meses, según la organización.
Si en mayo se esbozaban tres posibles escenarios de cara al cómputo de final de año, con declives del 58 al 78%, ahora se decanta por una caída de la demanda «cercana al 70%».
Sus estimaciones apuntan a un inicio de la recuperación en 2021, con un levantamiento gradual de las restricciones y la esperanza de disponer de una vacuna, aunque regresar a los niveles del sector antes de la crisis sanitaria «llevaría entre 2 y 4 años».
Zurab Pololikashvili, secretario general de la OMT, ha subrayado que hay muchos destinos donde es posible viajar «de manera responsable y segura» y pide a los gobiernos colaboración para que «el turismo mundial se ponga en marcha de nuevo».
