El financiero estadounidense Bernard Madoff, autor de la mayor estafa piramidal conocida en la historia, ha muerto en la prisión en la que cumplía condena a los 82 años. Así lo han confirmado a AP fuentes familiares de Madoff, que también han dicho que el estafador ha muerto de causas naturales.
En contexto: Bernard Madoff dejó sin dinero a miles de personas, a las que estafó, según las autoridades, hasta 63.000 millones de dólares, cifra superior a los 50.000 millones confesados por él. Hasta que se descubrió su trama, en el año 2008, era uno de los hombres más respetados de Wall Street. Al año siguiente, fue condenado a 150 años de cárcel.
«Podemos confirmar que Bernard Madoff murió el 14 de abril de 2021 en el Centro Médico Federal de Butner, en Carolina del Norte», ha indicado un portavoz de la Oficina de Prisiones. Madoff había solicitado el año pasado salir de la cárcel porque sufría una enfermedad renal en fase terminal, pero su petición había sido rechazada.
En febrero pasado, el abogado de Madoff había informado que su cliente padecía una enfermedad terminal y no quería morir en prisión. Según el abogado, Brandon Sample, Madoff sufría «una enfermedad renal terminal, entre otras enfermedades graves». «La Oficina de Prisiones concluyó en septiembre de 2019 que Madoff tiene menos de 18 meses de vida a raíz de la naturaleza terminal de su insuficiencia renal», escribió Sample en aquel momento.
El diario The Washington Post informó entonces de que Madoff precisaba atención médica las 24 horas y solo se transportaba en silla de ruedas.
La petición de clemencia de Madoff, que quería hacer las paces con sus nietos y morir en su casa, fue denegada. «He pasado 11 años en prisión y con bastante franqueza, puedo decir que los he sufrido», dijo Madoff en una entrevista con el Post. «No ha habido un solo día en prisión en que no sienta la culpa por el dolor que he causado a las víctimas y a mi familia», sostuvo.
El la estafa de Madoff consistía en un esquema piramidal o esquema Ponzi, una forma de fraude que requiere constantemente de inversiones de nuevas víctimas para pagar ganancias a los inversores más antiguos. El efectivo de los nuevos inversores se utiliza para pagar a clientes ya existentes hasta que el esquema finalmente colapsa. Madoff nunca invirtió un centavo del dinero que sus clientes le confiaron.
Las autoridades estadounidenses han confiscado unos 4.000 millones de dólares vinculados a Madoff y esperan devolver este dinero a sus decenas de miles de víctimas. El Fondo de Víctimas de Madoff realizará pagos a más de 30.000 personas en todo el mundo que fueron estafadas por el financiero entre los años 70 y la década del 2000, según el Departamento de Justicia.