Formar a los trabajadores inactivos: clave para el Gobierno en la renovación de los ERTE
En la mesa de negociación se ha planteado que la prórroga no sea automática para que las empresas puedan solicitar nuevos ERTE
En la mesa de negociación se ha planteado que la prórroga no sea automática para que las empresas puedan solicitar nuevos ERTE
El Gobierno quiere centrar la nueva prórroga de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) en formar a los trabajadores que aún siguen inactivos, casi 177.000 personas en suspensión total hasta el 15 de septiembre que podrían tener problemas para su reincorporación al mercado laboral.
La negociación para la extensión de las ayudas a los ERTE ha empezado este jueves con el planteamiento por parte de sindicatos y patronal de que la nueva prórroga llegue hasta el 31 de enero de 2022, para evitar que expire en plenas fiestas navideñas.
El ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha dejado claro en una conferencia de prensa sobre los datos de empleo de septiembre que el «énfasis» de esta reedición debe estar en la formación.
En el último esquema, pactado a finales de mayo con los agentes sociales y en vigor desde el 1 junio, Escrivá consideró que la clave estaba en la reincorporación de los trabajadores y se establecieron mayores exoneraciones en la cotización de los empleados activados, que en total han sido cerca de 300.000 en tres meses y medio.
Este punto, que fue uno de los escollos de la pasada negociación, no es ahora la clave, ha reconocido Escrivá, dada la evolución de los ERTE y del mercado laboral, con buenos datos de afiliación en los últimos meses.
«Hay que formar bien a esas personas», ha subrayado.
UGT ha explicado que ha sido una reunión rápida y que el Gobierno se ha comprometido a llevar una propuesta de texto normativo a la próxima cita del martes 21, en la que espera se concrete cómo se quiere plasmar ese foco en la formación.
La prórroga no será automática, según CCOO
CCOO ha contado que en la mesa de negociación se ha planteado que esta prórroga no sea automática para que las empresas soliciten nuevos ERTE, aunque queda a la espera de la negociación el mecanismo concreto.
CCOO está de acuerdo con este planteamiento y además ha reclamado recuperar la prestación extraordinaria para fijos discontinuos y ampliar el llamado «contador a cero» -que expira el 1 de enero de 2022- para que el consumo de la prestación por desempleo siga sin computar de cara a una futura prestación.
El secretario general de CCOO, Unai Sordo, se había mostrado en una rueda de prensa previa a la reunión partidario de introducir algún elemento para «discriminar» eventuales situaciones de fraude entre los trabajadores que siguen en ERTE.
Los ERTE llevan un coste acumulado de 27.000 millones de euros
Escrivá ha dado datos del coste que han tenido los ERTE y otras medidas, como las ayudas a autónomos, puestas en marcha para amortiguar el impacto de la pandemia en el mercado laboral y que supera 40.000 millones de euros.
De esta cifra, los ERTE suponen unos 27.000 millones: 7.000 millones en exoneraciones a la Seguridad Social, a los que se suman alrededor de 20.000 millones en prestaciones de desempleo que abona el Ministerio de Trabajo.
A 15 de septiembre quedan 253.969 personas en ERTE
De acuerdo con los datos presentados por Escrivá, en lo que va de septiembre hay 18.221 trabajadores menos en ERTE, lo que sitúa el total en 253.969 personas.
Aproximadamente uno de cada tres trabajadores en ERTE (79.043 personas) tiene solo suspensión parcial -con lo que mantiene un porcentaje de actividad-, mientras que dos de cada tres están en suspensión total (176.926 personas).
Por modalidad, 107.011 trabajadores están en ERTE de sectores ultraprotegidos, el 77 % de ellos en el comercio, servicios de comidas y bebidas, servicios de alojamiento, transporte y agencias de viaje.
Otros 55.407 trabajadores se enmarcan en ERTE de impedimento o limitación, el 70 % en hostelería y comercio.
Los restantes 91.551 trabajadores se encuadran en ERTE que no tienen exoneraciones en las cuotas a la Seguridad Social y que no están concentrados en ningún sector en particular.
Fuente: EFE