El Gobierno empieza a tramitar un superfondo público de pensiones sin tener atado el anteproyecto con los agentes sociales
Se espera que se inicie su tramitación parlamentaria en enero para estar en vigor antes que acabe el primer semestre de 2022
Se espera que se inicie su tramitación parlamentaria en enero para estar en vigor antes que acabe el primer semestre de 2022
El Consejo de Ministros ha iniciado el trámite para desarrollar el funcionamiento de los planes de pensiones de empleo, simplificando su acceso para popularizarlos entre pymes, autónomos y funcionarios, y mejorando su fiscalidad.
Según ha explicado este martes el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, el Consejo de Ministros ha aprobado en primera vuelta el anteproyecto de ley de impulso a los planes de pensiones de empleo, que se espera pueda comenzar su tramitación parlamentaria en enero para estar en vigor antes de que acabe el primer semestre de 2022.
Como parte de esta ley, se crearán fondos de empleos de impulso público, facilitando el acceso a los mismos a pymes, autónomos, empleados públicos y trabajadores de rentas bajas.
«Serán planes colectivos más baratos activados desde la negociación colectiva», ha subrayado el ministro, que ha afirmado que los actuales «son caros» y para «rentas altas y muy altas».
Así, Escrivá ha explicado que se propiciará la competencia al seleccionar a las gestoras depositarias de estos planes mediante concurso público para garantizar así «unas comisiones muy bajas», tendrá una política de inversión financieramente sostenible y responsable y una comisión de control y seguimiento.
Para promover la suscripción de estos planes de empleo, la norma reforzará su acceso en la negociación colectiva, de forma que cuando se pacte en un convenio sectorial se abrirá a todas las empresas del sector.
Se pretende también simplificar su acceso con un sólo trámite frente a los siete actuales y mediante una plataforma digital común, al tiempo que abaratarlos, tratando de que comisiones, coste y producto «sean asequibles, frente a los planes individuales que son muy caros».
Asimismo se fomentará la promoción de planes por asociaciones de autónomos y colegios profesionales.
La reforma, apoyada en esos menores costes al ser planes de mayor volumen que los individuales, se acompañará de una modificación de los incentivos fiscales, de forma que se traslade el beneficio fiscal hacia estos modelos.
En este punto, Escrivá ha recordado que en los Presupuestos Generales del Estado para 2022 se incrementa aún más el límite de aportaciones a los planes de empleo, hasta 10.000 euros anuales, al tiempo que se reduce el de los planes individuales, hasta 1.500 euros.
El objetivo es continuar con un tratamiento fiscal ventajoso a los planes de empleo para favorecer estos productos, así como extenderlo a los autónomos, que podrán beneficiarse de las deducciones fiscales de ambos hasta un límite de 5.750 euros.
Escrivá ha explicado que en toda España solo tienen estos planes de empleo 1 de cada 10 trabajadores, mientras que en País Vasco son 1 de cada 2 y en otros países, 1 de cada 3, lo que demuestra el «potencial extraordinario de un producto que no ha llegado a casi nadie».
Este anteproyecto de ley de planes de pensiones se enmarca en la reforma de pensiones que está llevando a cabo el Gobierno y es uno de los asuntos que están encima de la mesa de diálogo social con patronal y sindicatos, quienes podrán realizar también aportaciones en el trámite de audiencia pública que ahora comienza.
Fuente: EFE