Todo lo que debes saber sobre las rebajas de enero

Las rebajas de enero son el clásico postnavideño. Habitualmente dan comienzo tras el día de Reyes, aunque en los últimos años muchos comercios las han adelantado y además las comunidades autónomas tienen diferentes normativas al respecto y establecen sus propios calendarios. La región más madrugadora en 2022 es Madrid, que ya ha abierto su periodo de rebajas. Lo hizo el sábado día 1 -mal día para ir de compras- y durará hasta el 31 de marzo. La siguiente comunidad en poner en marcha las rebajas será Aragón, desde el 6 de enero hasta marzo. En las otras 15 comunidades, las rebajas darán comienzo el 7 de enero y concluirán el 6 o el 7 de marzo, salvo en el País Vasco, que lo harán el 31 de marzo, y en Cantabria, aún más tarde, el 6 de abril; mientras que Galicia será la última en poner fin a los saldos, el 7 de abril. En la ciudad autónoma de Melilla el periodo es también del 7 de enero hasta marzo, mientras que la de Ceuta será la primera zona de España donde finalicen, el 28 de febrero.

Por comercios, la gran mayoría de los establecimientos apuesta por el 7 de enero para iniciar sus rebajas, salvo algunos que las han anunciado desde el día 3, como Mango o H&M. Las tiendas del grupo Inditex las iniciaron online el día 1, y lo harán en sus tiendas físicas el 7. En todo caso, comprar en las rebajas no significa que los consumidores perdamos derechos. Simplemente debemos encontrar los mismos productos a precios más baratos y con las mismas garantías.

Condiciones para la venta de productos rebajados

No importa el producto que compremos en rebajas. La ley ampara a los consumidores en estos plazos de abaratamiento de productos y estos siguen teniendo sus derechos como tales al margen de que puedan comprar artículos a precios más baratos. Esto es válido para todas las rebajas, aunque algunas tiendas anuncien las segundas rebajas o las terceras dentro del plazo establecido. Los comercios deben respetar una serie de requisitos de obligado cumplimiento, empezando por mostrar en alguna zona bien visible para los clientes la duración de su periodo de rebajas.

Todos los artículos rebajados deben haber estado anteriormente a la venta en el establecimiento al menos durante un mes y en su etiquetado debe figurar claramente el precio anterior y el nuevo e indicar el porcentaje de la rebaja. Además, los productos abaratados no pueden convivir con los que no lo han sido, sino que deben ubicarse en zonas diferentes para no confundir a los consumidores y estar en perfectas condiciones. Es decir, no se pueden vender en rebajas productos con defectos o taras como rebajados, sino ofertarlos como tales. La picaresca campa por las tiendas en rebajas, pero la normativa es clara. Una tienda puede establecer condiciones especiales en sus rebajas, aunque estará obligada por ley a exponerlas en un lugar a la vista de los clientes o no serán aplicables. La tienda, por ejemplo, puede establecer el método de pago que quiera, admitir el desembolso con tarjeta o no, o hacerlo solo desde una determinada cantidad. En todo caso, debe exponerlo claramente.

No tienen por qué devolverte el dinero

Las garantías no pueden verse afectadas porque un producto esté rebajado. Son las mismas que para un artículo que no lo esté. Todos deben admitir cambios y devoluciones, salvo que se indique claramente que ese producto no se cambia. Para ello será necesario conservar el tique de compra o la factura. De lo contrario, el establecimiento no tendrá por qué atender reclamaciones. Las tiendas tienen la obligación de facilitar las devoluciones si los productos están dañados o presentan defectos, pero también deben cambiarlo si así lo pide el cliente y lo reintegra como lo compró, sin cortar etiquetas u otras alteraciones de mención.

Eso sí, los comercios no tienen por qué devolverte el dinero. Dependerá de las condiciones que establezca cada uno, pero que ofrezcan la posibilidad de cambiarlo por otro producto y no devolverte el dinero o que te den un vale de compra, no es ilegal si se ha indicado que así funciona ese establecimiento. En cuanto a las reclamaciones online, el consumidor tiene derecho a devolver el producto en los 14 días naturales posteriores a su recepción, puesto que así le ampara el derecho de desistimiento.

Más plazo de garantía

Además, un aspecto a tener en cuenta en que con la llegada de 2022,  los productos comprados a partir del 1 de enero tienen, tal y como establece la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios, una garantía de tres años frente a los dos de antes.

Dentro de este plazo, y siempre que se aplique un defecto de confomidad, el cliente podrá elegir entre la reparación o la sustitución del mismo. Asimismo, en el caso de bienes de segunda mano, la normativa mantiene que consumidor y empresa podrán pactar una duración determinada del plazo de garantía, que nunca podrá ser inferior a un año.